¿Equipo que gana no se toca?

Ésta será una semana distinta, no sólo porque el equipo ganó, sino además porque el cuerpo técnico tendrá tiempo suficiente, recordemos que Defensa juega recién el lunes, para armar el posible titular. Ahora la gran incógnita es saber si Ramacciotti le volverá a dar confianza a los mismos once que le ganaron a Chacarita, o cambiará en algún puesto específico.

Por Guido Cichello para Varela al Día



La semana pasada el gran problema era la obligación por conseguir los tres puntos. Ramacciotti no encontraba el equipo y veía como mejor opción cambiar y cambiar. Y tanto probó, que parece haber encontrado el camino, justo cuando las papas quemaban. Ahora el problema, un lindo desafío por cierto, es ratificar o no, a los que vienen de rendir de gran forma ante el Funebrero. Algunos entrenadores, alistados bajo la bandera de Carlos Bianchi, prefieren mantener siempre un once ideal, y sólo ir retocando algunas cuestiones, en caso de que sean cambios obligados. Están los otros, que cambian dependiendo del rival de turno. Quizás sea ahí donde Rama se sienta más cómodo. Pero éste caso es distinto. Independientemente de los mendocinos, hoy por hoy el técnico tiene la posibilidad de mantener la base. Puede que con el correr de las fechas vaya sumando o reforzando lugares. Pero los once que respaldaron el técnico el último sábado, merecerían la chance de tener continuidad. No será una decisión sencilla dejar a fuera a Juan Manuel Azconzabal ni tampoco a Leandro Cuesta. Lo mismo sucede con Cristián Milla que de a poco va consiguiendo minutos de juego y poniéndose bien físicamente. Mucho dependerá del técnico lo que pase en Mendoza, pero también de éste grupo de jugadores que demostró capacidad para levantarse en la adversidad. Ya dieron el primer paso, por eso un buen resultado ante Independiente, podrá solidificar aún más, al grupo y sobre todo a un equipo que se armó para pelear cosas importantes.