Durante junio pasado, la Municipalidad decidió intervenir la Dirección de Tránsito, poniendo a su frente a la Subsecretaria de Gobierno del Municipio, la Dra. Mariana Corrales.
Fue el propio intendente Pereyra quien a través de un decreto tomó esta decisión, aparentemente motivada en diversas irregularidades que venían produciéndose en esa área vital de la comuna desde hacía meses.
Dos fuentes de extrema credibilidad confirmaron a Mi Ciudad que entre las causas que llevaron a hacer esta movida, se encuentran anormalidades relacionadas con el accionar de los colectivos «truchos» en nuestra ciudad. «Muchos de estos vehículos- confió un alto funcionario a este medio- circulan sin cumplir los más mínimos requisitos de seguridad, y hasta sin seguro».
De acuerdo a las mismas fuentes, otro tema caliente parece ser el de la «balanza» que se encarga de pesar los camiones que pasan por las calles y avenidas de la ciudad. Si desde ese sector se otorgara «vía libre» el paso indiscriminado de estos pesados vehículos, se terminaría por destrozar aún más las ya casi inservibles arterias locales. De hecho, a diario puede verse como el tránsito pesado sigue circulando por la avenida San Martín, pese a la pavimentación a tales fines y hace años, de la avenida Novak, sin que ninguna señal obligue a desviarse hacia esa importante vía de comunicación. ¿Había «hijos y entenados» a la hora de controlar quién puede pasar y quien está excedido de peso para hacerlo? ¿Alguien hacía la «vista gorda»?
Un tercer punto de conflicto era el de las grúas que levantaban los automóviles mal estacionados. O mejor dicho, la propiedad de esas grúas. ¿Son de la esposa de un funcionario?
Por ahora, las preguntas no tienen respuestas, y la Comuna parece haber elegido actuar reservadamente en el caso.
Publicado por el periódico Mi Ciudad
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