viernes, 15 de noviembre de 2013

LA UNAJ CONMEMORÓ EL NATALICIO DE ARTURO JAURETCHE



Además de tener un enorme impacto en la educación de Varela y su área de influencia, la Universidad puso en su lugar a un hombre destacado en el pensamiento nacional. Hasta la creación de la casa de altos estudios, por cuestiones de silenciamiento históricos, Arturo Jauretche prácticamente había sido prohibido en la práctica en la educación formal. “Qué lindo como cambian los tiempos si ahora hasta hay una universidad que se llama Jauretche”, había dicho Norberto Galasso cuando conoció que así se llamaba la universidad local.
Tanto han cambiado, que ayer se vivió una jornada emotiva y conmemorativa en la institución universitaria con la inclusión de charlas, proyecciones y una muestra sobre la obra y vida de Jauretche. Jauretche, junto con Homero Manzi, Luis Dellepiane, Gabriel del Mazo, Raúl Scalabrini Ortiz, Manuel Ortiz Pereyra y otros fundó Forja (acrónimo de Fuerza de Orientación Radical de la Joven Argentina) un 29 de junio de 1935. Esta agrupación política que desarrollaría los lineamientos del nacionalismo democrático, opuesto a la vez al nacionalismo conservador de los sectores reaccionarios y a la política liberalizadora del gobierno de Agustín P. Justo. Marginados de la esfera política partidaria, los actos de FORJA se realizaron sobre todo a través de manifestaciones callejeras y publicaciones de edición propia (los conocidos como Cuadernos de FORJA). En ellos criticaban las medidas del gobierno, a partir del pacto Roca-Runciman, y argumentaban que el Banco Central había sido fundado para que los hombres de la finanzas ingleses controlaran el sistema monetario y financiero argentino, que se había conformado la Corporación del Transporte para que los ferrocarriles británicos no tuvieran competencia, que no convenía la ruptura de relaciones con la Unión Soviética, pues ésta podía significar un importante comprador de los productos agropecuarios argentinos. Con respecto a la política interior, aducían que el gobierno de Justo intervenía las provincias donde ganaban partidos opositores al gobierno, y que el salario y la desocupación habían empeorado. Uno de sus principios incondicionales era el mantenimiento de la neutralidad argentina ante la próxima Segunda Guerra Mundial. Después se sumó a trabajar con Juan Domingo Perón en el proyecto nacional que este llevo adelante donde aporto muchas ideas y proyectos en beneficio del país. Ayer 13 de noviembre cumpliría 112 años y la universidad que lleva su nombre por primera vez en la historia argentina, le rindió homenaje.

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