Los varelenses por estas horas están sin servicio de transporte público de pasajeros comunal. La empresa 30 de Agosto ya no tiene más la concesión de los ramales que intercomunican a los diferentes barrios de Varela y en las próximas horas una nueva línea arribará para prestar el servicio durante los 180 días que dure la emergencia decretada por el intendente Julio Pereyra. En el mientras, se trabajará, según se dijo, en los pliegos de una nueva licitación. Para la polémica empresa era, quizás, un final cantado.
Pero a la pesadilla de los usuarios que hoy no pueden ser transportados, queda en evidencia una situación latente y candente en otros ámbitos de la vida privada y social: la falta de compromiso de algunos empresarios con el crecimiento en otros órdenes que ha tenido el distrito. Florencio Varela tuvo que afrontar hace dos años un temporal durísimo que dejó en evidencia la falta de inversión de la empresa EDESUR, la prestataria del servicio eléctrico en la zona. Postes podridos no pudieron soportal el vendaval y cayeron al piso dejando en penumbras a gran parte de la población por varios días y hasta semanas. Esto sin contar los largos apagones en épocas corrientes que altera la tranquilidad vecinal. En esta ocasión, el municipio y el gobierno nacional, tuvo que salir a tapar el bache mediante un convenio que dota por estos días a varios barrios de nuevos tendidos eléctricos. Tanta es la desidia empresarial que, en aquella emergencia, la comuna tuvo que abastecer a Aguas Bonaerenses S. A, de generadores eléctricos para poner en pie a los pozos de agua para devolver el suministro. Parece increíble que ambas compañías no los tuvieran. Incluso, fue Infosur, quien dio cuenta del escándalo ya que uno de los generadores que tenía EDESUR fue provisto a un hipermercado y no a la estaciones de agua potable. El problema del transporte es quizás uno de los mayores desafíos de estos tiempos de crecimiento. La propia empresa 30 de Agosto había admitido un tiempo atrás que el corte de boletos creció hasta un 500 por ciento en los primeros ocho años del kirchnerismo. Los delegados de los trabajadores admiten por estas horas que eso no se vio reflejado en las “unidades” que circulan por los barrios. Uno de ellos, Jorge, sostuvo que “nosotros somos los que damos la cara frente al pasajero, había colectivos que salían de la empresa y se quedaban a las ocho cuadras y la gente se queja con nosotros”, confió en charla con Infosur. Otros trabajadores deslizan por lo bajo que había unidades “que cobraban el subsidio al transporte, pero nunca salían de la terminal”. Habrá que hurgar en los números finos de la empresa que se derrumbó para lograr desentrañar la madeja de la crisis. Sin embargo, a todas luces queda en evidencia la falta de inversión para satisfacer la enorme demanda de vecinos de Varela que utilizan el servicio para llegar al trabajo o a la escuela. EXPLOSIÓN La crisis de “La 500” terminó de explotar la semana pasada cuando la empresa no pudo hacer frente al pago de los salarios de los trabajadores que concretaron una medida de fuerza que dejó a todo Varela virtualmente de a pie. Sumado a una situación supuestamente irregular de un contrato firmado con una compañía de Santa Fé a la que el municipio no se le había comunicado. Esos fueron los últimos pasos. A partir de allí el municipio puso en marcha lo que ya había sido estudiado profundamente, el fin de la concesión de los ramales a su cargo y convocar a una nueva empresa para que restablezca y brinde el servicio, mientras se proceda al correspondiente llamado a licitación que permita normalizar definitivamente la situación, de acuerdo a las normas vigentes. Según se informó, la medida se adoptó en conjunto con los representantes de los trabajadores, tras el encuentro mantenido en el polideportivo La Patriada, en el que autoridades municipales decretaron el estado de emergencia en el trasporte del distrito. Durante el encuentro presidido por el intendente Julio Pereyra, los trabajadores trasmitieron la difícil situación que atraviesan por no percibir sus haberes y por las condiciones laborales que sufren, frente a la imposibilidad del sector empresarial de cumplir con un servicio de calidad, en cuanto a frecuencias y estado de las unidades. A fin de revertir la situación, se inició un plan para restablecer el servicio en los diferentes ramales, mediante la convocatoria de una nueva empresa que se hará cargo de la concesión, mientras se proceda a realizar un nuevo llamado a licitación para normalizar definitivamente la situación, con un servicio de calidad para los vecinos. Del encuentro participó el secretario general de la Unión Tranviario Automotor (UTA), Roberto Fernández, quien, al término del encuentro, dijo: “el sector empresario lamentablemente ha desaparecido; no ha cumplido las normas, no ha respetado a los usuarios, ni respetado a los trabajadores, al no pagarles los salarios desde hace mucho tiempo”. En el mismo sentido, explicó: “Por todo esto, se cortó el servicio. Ahora, hay que esperar que una empresa se haga cargo provisoriamente, hasta que se llame a la licitación correspondiente. Les pedimos paciencia a los usuarios hasta que se recupere el servicio. Queremos que se logre lo antes posible porque también está en juego el salario y el trabajo de las familias de los trabajadores. Quizá esta desgracia termine en que tengamos un mejor servicio y una mejor empresa”. En tanto, Vicente Jorge Pamassi, delegado de los trabajadores de la 30 de agosto pidió a los vecinos disculpas de parte de los empleados de la empresa al sostener: “queremos pedirle disculpa a los usuarios, ya que nosotros vivimos de ellos que viajan; espero que nos comprendan porque sin sueldos, no podemos vivir”. Además adelantó: “Cuando cobremos, volvemos a trabajar”. Gracias Roberto (Fernández) y al municipio, para tener a corto plazo una solución”. Otro de los representantes de los trabajadores, Guillermo Alejandro Mac Glonglin, sintetizó: “sentimos satisfacción que haya salido positiva la reunión y por haber encontrado una solución al conflicto. Somos todos de Varela representantes de los compañeros. Nos vamos contentos porque la solución esta, ahora veremos cómo evoluciona la misma”. Desde el municipio, el secretario de Gobierno, Andrés Watson explicó que “los trabajadores mantienen abstención de tareas por falta de pago del salario. Y en virtud de todos los incumplimientos, se determinó una solución conjunta para que los vecinos viajen como corresponde y se preserven las fuentes laborales, tal como nos marcó el Intendente”. En tanto, el secretario Legal y Técnico municipal, doctor Jorge López, informó: “primero se declaró el estado de emergencia del trasporte ante este estado de zozobra, por los incumplimientos empresarios. Hecho esto, se avanza en la solución, la cual tiene que ver con hacer un gerenciamiento temporario con una nueva empresa, la cual tiene que aportar el material rodante, con unidades acondicionadas para cumplir con su fin. Todo esto, va a llevar unos días, pero hay que hacerlo de la manera más rápida posible para restablecer el servicio cuanto antes”. Además del nutrido grupo de representantes de trabajadores, también formaron parte del encuentro, la presidenta del Concejo Deliberante, Laura Ravagni; y la secretaria de Seguridad Vial y Movilidad Urbana, Mariana Corrales.
Info Sur Diario
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