Antes de partir de pretemporada a Mar del Plata, Diego Cocca
elogió el juego de su Halcón sensación, hoy en ascenso. Y charló de su modelo a
seguir: el Barsa de Pep Guardiola, DT al que pudo conocer.
Diego, ¿qué querés para tomar? Iluso el cronista. La
respuesta fue cantada y atentó con robar alguna sonrisa en el lugar. Dos
minutos después, Diego Cocca tenía entre sus manos una botella helada de la
cola más famosa y a la que, subliminalmente, adhiere su apellido. Distendido,
gentil y con unas ganas tremendas de hablar de fútbol, el entrenador de Defensa
y Justicia se juntó con Olé horas antes de partir rumbo a Mar del Plata (lo
hará este mediodía), donde su equipo comenzará la dura preparación hacia un
sueño que pinta para hacerse realidad: ascender por primera vez con el Halcón a
la máxima categoría. A volar...
-¿Pensabas terminar el año segundo, con 41 puntos y en
ascenso? -La ilusión está siempre, pero la realidad es que a principio de
temporada vinieron 13 refuerzos y quedaron tres del torneo pasado. O sea, era
un plantel nuevo. Entonces no nos pusimos una meta tan alta, sino más bien
pensamos en ir conociéndonos mutuamente. Y eso hacía suponer que nos iba a
llevar un tiempo, pero el equipo arrancó ganando la primera fecha y no se bajó
más. Los jugadores se adaptaron rapidísimo y nos demostraron que se bancaron la
presión. La verdad es un grupo espectacular.
-Encima se trata de un equipo que se armó sin nombres
rutilantes...
-Lo que dejamos en claro era la manera en que íbamos a jugar
y había que ver cómo se adaptaban. Queríamos que fueran protagonistas, que
presionaran, que tuvieran la pelota. Y les sentó bien de movida. Obviamente
buscamos jugadores con buen pie y desde los amistosos el equipo mostró su
personalidad. Ahí nos dimos cuenta de que esto iba en serio.
-En este fútbol amarrete, ¿sentís que ustedes y Banfield,
por ejemplo, están demostrando que intentando se puede ganar más de lo que se
pierde? -Y, yo no puedo hablar de lo que piensan los otros equipos del nuestro.
Pero sí te puedo decir lo que yo veo, y es que nosotros propusimos tener la
pelota, siempre. Los resultados nos acompañan y quedó bien en claro que éste es
el camino.
-¿Los técnicos jóvenes están marcando tendencia? Lo digo por
vos, Almeyda, Simeone, los Barros Schellotto...
-Creo que vienen generaciones nuevas y la de ahora quiere
investigar, ver sistemas, jugadores... Y la realidad marca que hoy el ícono
mundial es el Barcelona, que habla de juego asociado, de tener la posesión de
la pelota. Entonces todos lo queremos copiar e imitar, y eso le hace bien al
fútbol mundial.
-Vaya modelo que pretendés para tu Defensa.
-Cada uno siente el fútbol de una manera y como técnico
tiene que transmitirla. En mi caso, he visto partidos del Barcelona y para mí
fue y es el mejor equipo que vi en mi vida. Me ponía aplaudir enfrente de la
tele... Y he tenido la suerte de ir a verlos y de hablar con Guardiola cuando
lo dirigía. Ver la tranquilidad que se respira y que tienen una idea clara que
es asociarse para jugar. No hay otro misterio, eh.
-¿Y cómo fue ese contacto con Pep? -Me acuerdo que me di el
gusto porque ya se hablaba de si Guardiola renovaba o no en el Barsa. Le dije a
mi mujer que quería ir a verlo antes de que se fuera y tuve la suerte de
decirle esto, que aplaudía al ver a ese equipo. Fue una satisfacción personal
enorme.
-¿Te imaginas un día aplaudiendo de esa manera al equipo que
vos lograste formar? -Yo me siento orgulloso de este plantel, gane o pierda.
Defensa es un equipo digno de ver, hay que ir a verlo porque contagia. Los
hinchas están entusiasmados y es porque algo transmite. Eso significa que
estamos haciendo bien las cosas.
-A ver, ¿en junio te ves dando el gran salto? -Ojalá, es un
torneo difícil pero no vamos a negociar nuestra forma de juego.
Silvio Favale
Ole.com.ar
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