Crece mafia que lucra con la ocupación ilegal de terrenos

El fenómeno se extiende en forma alarmante en Capital Federal y Gran Buenos Aires y días atrás hubo nuevas tomas en Florencio Varela, donde hasta el propio intendente Pereyra alertó Crece mafia que lucra con la ocupación ilegal de terrenos Notas relacionada Lugano: hay varias casillas armadas en el predio ... Volvieron a ordenar el desalojo en el predio de ... La Mafia de los Lotes vende terrenos usurpados La ocupación ilegal de terrenos se extiende en forma alarmante por Capital Federal y Gran Buenos Aires, donde operan mafias que lucran con la venta de lotes y actúan bajo una metodología que involucra al menos tres delitos: usurpación, estafa y asociación ilícita.
Así se vio recientemente en la violenta toma de Lugano, donde se ofrecieron lotes con precios de 10.000 pesos para los que lindan con la villa 20 y de hasta 20.000 pesos para los que miran a la avenida Fernández de la Cruz. En tanto, esta semana se produjeron nuevas tomas de tierras en distintos barrios de Florencio Varela. En ese distrito creció la preocupación de las autoridades por el accionar de la llamada "Mafia de los Lotes", una organización que ofrece las parcelas usurpadas a un precio de 20.000 pesos. Este mecanismo de estafas se conoció a través de las redes sociales y hasta el propio intendente Julio Pereyra alertó sobre esta modalidad, al tiempo que instó a los jefes policiales del distrito a trabajar para poner un freno a las sucesivas ocupaciones ilegales. En las últimas semanas, se registraron intentos de toma en Bosques, Pico de Oro, Villa San Luis, San Jorge y Villa Argentina, este último lugar donde aún permanecen cientos de familias instaladas. En tanto, la semana pasada el Ministerio Público porteño en diversos operativos realizados en domicilios particulares y oficinas comerciales secuestró documentación que probaría que tres familias se encuentran detrás de la toma con fines lucrativos. Entre la prueba recolectada habría documentación que revela la existencia de operaciones en dólares en lo que sería un modus operandi en la zona desde el año 2002. Consultado por este diario el titular de Defendamos Buenos Aires, Javier Miglino, destacó que "en el accionar de estas mafias se despliegan al menos tres delitos: la usurpación de tierras, la estafa por la venta de lo ajeno y la asociación ilícita". "La investigación de los dos primeros delitos le corresponde a la justicia local y la del último, que es el más grave, a la nacional", explicó. Según Miglino, la propagación de las tomas se vio facilitada por "la suavidad de la justicia que en el caso de la porteña ha reaccionado con lentitud y sin cumplir con las medidas procesales de rigor". "No cumplieron con la obligación de constituirse en el lugar ni bien conocieron la toma, ni la de identificar a los usurpadores para ver si tenían antecedentes ni tampoco cercaron el lugar y pusieron una guardia para evitar que siga entrando gente", señaló. En tanto, para Facundo Di Filippo, del Colectivo por la Igualdad, "en toda toma aparecen los que tienen la capacidad de administrar la toma y funcionan como fuerza de choque aprovechando la necesidad de los otros". Para el ex legislador porteño "todos saben que el precio pagado no convierte en propietario al comprador, sino que sirve como pago por la oportunidad de sacar algún beneficio de la ocupación". La situación en Lugano entró en un impasse tras las infructuosas negociaciones que a instancias de la jueza Elena Liberatore mantuvieron esta semana funcionarios porteños, de la Defensoría del Pueblo y vecinos. Por su parte, la jueza en lo penal y contravencional porteña Gabriela López Iñiguez volvió a ordenar el desalojo de las 200 familias que ocupan el predio tomado, aunque dispuso que la misma se haga efectiva tras ser confirmada por su superior jerárquico. En provincia, esta semana el concejal del Frente Renovador (FR) de Florencio Varela, Dardo Ottonello advirtió que los promotores de las tomas son 'un grupo de vivos, con mucha experiencia" y reclamó soluciones inmediatas para evitar que la situación se descontrole. El edil hizo hincapié en las erogaciones que los asentamientos ilegales generan para el erario público, que tiene que hacer frente a la provisión de servicios esenciales. "Cada una de estas urbanizaciones le demanda al Estado servicios, salud y educación. Estos requerimientos se imponen y no son planificados, por lo que se generan grandes problemas para administrar correctamente el Municipio", señaló. Todas las semanas En este sentido, el legislador del FR aseguró que 'hay que analizar porque en Varela tenemos tomas de tierras prácticamente todas las semanas, cuando en los distritos vecinos esto no ocurre'. 'Algo está funcionando mal. Hay que investigar quiénes están detrás de todo esto', enfatizó Ottonello. El edil agregó que "muchas personas vienen de otros municipios o provincias, porque en Varela se aseguran poder acceder a una porción de tierra. Pero algunos de ellos no tienen necesidad habitacional, se meten a usurpar parcelas para enriquecerse a costa de la verdadera necesidad de los pobres".

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