A este extraño comportamiento hay que sumarle que un concejal del Frente Renovador confeso públicamente que habían tenido un desayuno de trabajo con el Secretario de Hacienda Ariel Cicco y discutido allí las reformas a la ordenanza fiscal-tributaria (aumento de tasas).
De buena fe se puede pensar que la convivencia democrática se ha establecido en el Deliberante Local. Sin embargo resulta difícil creer que el exaltado Dario D’Aquino (casi lo trompea a Ottonello), el ultra cristinista Romero y el neo pereyrista Carassalle hayan votado con agrado y de motus propio ordenanzas y comunicaciones originadas en el Massismo.
Parece más potable la idea de que los ex amigos (Pereyra y Rios) hayan llegado a algún acuerdo que beneficie política o económicamente a ambos.
Hasta ahora los únicos que parecen mantener la coherencia en sus posiciones son los concejales Camilletti y Salatino de Nuevo Encuentro, si les dura seguro que el oficialismo seguirá rechazando todas sus propuestas.
David Gómez
Secretario General
Partido Comunista.
en Nuevo Encuentro.
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