Un futbolista argentino fue protagonista de un verdadero escándalo en el fútbol mexicano que terminó con una huelga de los árbitros de ese país.
Todo comenzó cuando Enrique Triverio, delantero que pasara por Defensa y Justicia y Unión de Santa Fe cometiera un grave error en el encuentro que su equipo, el Toluca, disputaba con Morella.
El jugador argentino, disgustado con una sanción del árbitro que había decidido expulsar al arquero Talavera, le puso una mano en el pecho a la altura del corazón.
Por esa acción el juez además de echar al arquero le sacó tarjeta roja al propio Triverio y a Jesús Méndez, otro argentino que jugara en River, Boca y Rosario Central, entre otros equipos de la Argentina.
Los problemas se agravaron aún más cuando la Comisión Disciplinaria le aplicó ocho fechas de suspensión a Triverio: los árbitros exigían, al menos, un año sin jugar para el futbolista de nuestro país.
La agresión de Triverio, más otros encontronazos entre jugadores y árbitros, provoco la huelga de los árbitros que pararon el fútbol en busca de un mejor trato.
Por su parte, Triverio escribió en su cuenta de Twitter: "Me siento avergonzado por lo que sucedió. Estuve mal con el árbitro y ofrezco mis disculpas hacia él. En ningún momento busqué lastimarlo, lesionarlo, patearlo... Fue un acto e impulso desmedido".
eldia.com
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