Durísima carta del cura De la Serna a Héctor Salatino

Eduardo de la Serna (izq) lo cruzó fuerte a Héctor Salatin
Eduardo de la Serna conoce bien Florencio Varela. Fue durante años el sacerdote de la parroquia Divina Providencia y allí le dio impulso a la Radio del Obispado de Quilmes a fines de la década del 80. Además, es primo lejano del Che Guevara. Estuvo ligado desde la juventud con el sector de los sacerdotes de tercer mundo y conoció al padre Mugica; de la Serna fue ordenado sacerdote en 1981.
El padre de la Serna tiene como referente a quien fuese su obispo, el desaparecido Jorge Novak,
quien fue uno de los pocos obispos argentinos que tuvo una actitud de denuncia contra la Dictadura Militar. Desde su ordenación de la Serna ha trabajado para y por los sectores carecientes de la población y hoy es párroco de la parroquia de Jesús el Buen Pastor en la localidad de San Francisco Solano.
Ferviente defensor del Modelo Nacional y Popular en las últimas horas salió a cruzar con dureza a Héctor Salatino, del Nuevo Encuentro, después de que se publicara un afiche por las redes sociales sobre Belén Marino, candidata de la lista de Julio Pereyra, quien triunfó en la interna del Frente para la Victoria y a la que se acusó de cómplice desde el sitio de Facebook Nuevo Encuentro Zeballos.
En ese contexto, De la Serna fue muy duro con Salatino, a quien conoce por el trabajo en la Diócesis de Quilmes. Recordemos que el concejal es Diácono Permanente.
“Hace muchos, muchos años, estoy como cura en la diócesis de Quilmes. Y hace muchos, muchos años comparto encuentros con otros muchos curas que a su vez también tratamos de estar, conocer, pensar y vivir entre el pueblo”, comienza escribiendo De la Serna, según publica la misma Marino en su cuenta de la red social.
“Como cura, desde 1987 llegué a Florencio Varela, donde sigo teniendo mi domicilio legal. Y conozco a mucha gente de la ciudad. Conozco a algunos diáconos, conozco desmanejos en las escuelas de la diócesis, conozco corrupción”, señaló el sacerdote en su misiva.
La frase apunta directo contra uno de los rumores más fuertes sobre la actuación de Salatino en el colegio Perpetuo Socorro.
“Y conozco a María Belén Marino. La bauticé, y desde entonces sigo compartiendo con su familia y luego también con ella, una amistad. Conozco los problemas económicos que padecieron, los esfuerzos que debieron hacer para salir adelante con dignidad. Y conozco su presente.
Soy consciente que muchos en el conurbano, derrotados en las urnas no pueden menos que manifestar públicamente su suciedad. Ya vemos a varios derrotados ensuciando a sus competidores en las PASO mostrando su calaña y lo que nos hubiera deparado un eventual triunfo.
No soy un defensor del gobierno municipal del intendente Pereyra. Pero ganó. Mucho menos defiendo al diácono Héctor Salatino a quien no hubiera votado aunque hubiera habido lista única. Y veo, proveniente de sectores de Nuevo Encuentro, una campaña acusando a Belén de “cómplice”. ¿Cómplice de qué? ¿Cuál es o son los delitos del intendente Pereyra que los miembros de Nuevo Encuentro no han denunciado ante la justicia? Y – lo que me ofende – ¿en qué sería cómplice Belén por estar en las listas como candidata a Concejal por el FPV?
Repudio la actitud de malos perdedores de los miembros de Nuevo Encuentro, espero, reclamo, ¡exijo!, del ex candidato poli-derrotado Salatino, un repudio a los carteles acusando a Belén de cómplice, y espero que – como corresponde a una dignidad que a veces no manifiestan tener – trabajen activamente para un nuevo triunfo del FPV en Florencio Varela donde como concejales podrán colaborar a mejorar lo que falta, a evitar corrupciones y trabajar por un Varela mejor. No es eso lo que escucho decir del pasado de Salatino como concejal en el Municipio”, señaló la carta que firma el Pbro. Eduardo de la Serna

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