El 10 de diciembre se iniciará un nuevo período en todos y cada uno de los distritos. Son muchos los intendentes que tendrán dos años tranquilos, con un Concejo totalmente a su favor. Pero también son varios los que para lograr imponer sus propuestas necesitarán del diálogo y el consenso. Necesitarán que otras bancadas levanten las manos a su favor, ya que con las propias no es suficiente.
Por otra parte, estos jefes comunales deberán estar atentos y no pisar el palito, pues lo pedidos de informes, las interpelaciones y porqué no la conformación de comisiones investigadoras que vayan en busca de la destitución, pueden estar a la orden del día. Todo dependerá de cómo se muevan estos jefes comunales que aunque ganaron, no contarán con mayoría en el HCD.
En Almirante Brown, la victoria de Mariano Cascallares consolida al FpV como la primera minoría dentro del Concejo, con diez ediles. La pregunta pasa por cómo jugará el giustozzista Todos por Brown, que tendrá siete integrantes. Si se mueve como K, el actual titular del IPS no tendrá inconvenientes. Además, Cambiemos contará con cuatro ediles y el massismo con tres.
En tanto, en Avellaneda Cambiemos logró en octubre colar con cuatro bancas, el oficialismo seis, y el Frente Renovador dos. Así, el FpV tendrá once manos, siendo la primera minoría. Cambiemos incorporará cuatro concejales (entre UCR y macristas), pero podría añadir una mano más si el edil radical, Rodrigo Galetovich, se suma.
Por su parte, el massismo alcanzará las cuatro bancas con la posibilidad de sumar dos. El interbloque que conforman el GEN y el radicalismo tendrá un representante. Con estos números, Ferraresi quedó a un paso de lograr la mayoría absoluta. Pero a ciencia cierta, no la tiene. En caso que la oposición se mueva unida en determinadas cuestiones, el alcalde, como quien dice, sudará la gota gorda.
El intendente de Esteban Echeverría, Fernandeo Gray, ganó cómodamente. Sumó seis bancas y podría conseguir el acompañamiento del bloque Scioli Presidente, que lo acercaría al quórum propio. Todo indica que sí, pero nunca se sabe. La fuerza opositora más cercana es Cambiemos, que ingresó cuatro ediles: dos macristas, uno radical y otro possista. Es posible que este frente absorba los otros dos concejales que responden al intendente de San Isidro. UNA sumó tres ediles a su bloque.
En Escobar, tras los resultados electorales, ninguna de las fuerzas políticas con representación parlamentaria logró obtener mayoría propia en el HCD. El bloque Peronista Néstor Kirchner, que responde al actual alcalde, Sandro Guzmán, quedará reducido a cinco ediles a partir del 10 de diciembre. En tanto, el FpV obtuvo cinco lugares en el Concejo. El electo kirchnerista Ariel Sujarchuk podría torcer este panorama si lograra que los alfiles guzmanistas lo acompañen en el cuerpo deliberativo.
En Florencio Varela se amplía el número de concejales, pues fueron electos 12 y 10 bancas se pusieron en juego. El oficialismo, de las ocho que se le vencían, recuperó cinco. Se supone que trabajarán en interbloque con Nuevo Encuentro, aunque la histórica mala relación se recompuso recién después de las PASO. ¿Se recompuso?. Por su parte, el FR alcanzó diez escaños al sumar cuatro en la última elección. Cambiemos inaugurará bloque con tres ediles
En General Rodríguez, el panorama es complicado para el recién llegado macrista Darío Kubar. El Frente para la Victoria será la primera minoría en el futuro territorio amarillo. Sin embargo, fue el frente Cambiemos el espacio que se quedó con más ediles, cuatro de diez en juego (los únicos que tendrá). En tanto, el saliente Juan Pablo Anghileri (FpV) alcanzó tres escaños, y los renovadores, dos. Los K tendrán siete bancas y el massismo también siete, aunque divididos en dos bloques.
En tanto, el Concejo Deliberante de Hurlingham dividirá la primera minoría entre el zabaletismo y el acuñismo. El futuro intendente deberá apelar al consenso para poder avanzar con tranquilidad. El FpV logró el ingreso de cuatro ediles, que se suman a los cuatro que recién pondrán en juego su banca en 2017. Por su parte, el Frente Renovador logró ingresar tres, que se suman a los cinco que ya integraban el bloque. Cambiemos tendrá tres representantes y el socialismo uno.
En Ituzaingó, la mayor cantidad de bancas, quedaron divididas entre el oficialismo y Cambiemos. El Frente para la Victoria se quedó con cuatro de los diez escaños en juego. El frente electoral macrista-radical obtuvo la misma cantidad. Por su parte, el massismo se quedó con dos. La designación de autoridades se definirá debate mediante, puesto que son dos las fuerzas que se disputan la primera minoría (F. Justicialista para la Victoria y Frente Renovador), aunque se supone que el bloque Nuevo Encuentro jugará con el intendente Alberto Descalzo.
En la capital provincial, La Plata, el macrista Julio Garro impuso seis concejales de los doce en juego. El bloque sumaría al edil radical que ingresó en 2013, aunque no será suficiente. El bruerismo sólo metió cuatro concejales, pero uno saltaría al espacio de la ultra K Florencia Saintout. El Frente Renovador tendrá dos bancas más. Sin embargo se especula con que una jugará con el macrismo, porque es moyanista.
El año legislativo va a estar complicado para el intendente electo de Lanús, el macrista Néstor Grindetti. Tendrá un Concejo dividido y sin mayoría. El FpV recuperó cuatro de las cinco bancas que puso en juego, por lo que tendrá ocho ediles puros. Cambiemos suma cinco y asciende a siete la cantidad de escaños. UNA llega a seis al sumar tres lugares.
Sin embargo, estas cifras se modificarían debido al juego de tres massistas que renovarán en 2017. Antes de las elecciones uno definió su apoyo a favor de Grindetti, y el otro a Alvarez. La tercera se supone que seguirá cercana al Frente Renovador.
En Malvinas Argentinas, Leonardo Nardini (FpV), quien en el marco de la transición mantiene durísimos cruces con el saliente Jesús Cariglino, no la tendrá fácil en el HCD. La mayoría del cuerpo continúa respondiendo al alcalde saliente. El FpV ingresará seis ediles, que se sumarán a los cuatro que entraron en 2013. Por su parte, el cariglinismo accedió a 5 bancas y alcanza 13 en total, con lo que obtendría quórum propio.
En Merlo, se viven días de definición en el deliberativo, y el nuevo intendente, Gustavo Menéndez, se ilusiona con tener la presidencia. Por un lado, el Frente Grande Merlo/ Nuevo Encuentro mantiene cuatro ediles e ingresa cinco, por lo que tendría nueve bancas. Sin embargo, también apunta a recuperar una concejalía destituida que hoy tiene Othacehé, quien también cuenta con nueve bancas. El FR y el PRO tendrán tres escaños cada uno.
En Morón, el intendente electo por el PRO, Ramiro Tagliaferro, deberá renunciar a su banca, a la que asumió como miembro del FR. El jefe comunal saliente, Lucas Ghi, se agrega al organismo deliberativo. La nueva gestión no logró conseguir el control del HCD, ya que el FpV queda con ocho ediles; mientras que por Cambiemos ingresarán seis concejales, aunque se sumarían los afines Vanesa Sosa (Cariglino Conducción) y Hugo Legramanti (GEN). En tanto el FR quedará con siete ediles, sumando cuatro concejales. Resta esperar la posición del referente socialista.
En Quilmes, el cocinero Martiniano Molina no tiene un futuro sencillo. Si bien Cambiemos se quedó con seis bancas de las doce que estaban en juego, el FpV obtuvo cuatro, y con ese número se impone como la primera minoría. De todos modos, resta ver qué ocurre en esta fuerza, ya que la misma presenta varias líneas internas. Por otro lado, el alcalde PRO contará con dos bancas radicales. En tanto que será clave la posición del Frente Renovador, que obtuvo dos bancas y las suma a las de Casazza y Queijeiro y el unibloque vecinalista de Nunzio Miguel.
Aníbal Regueiro, intendente de Presidente Perón, consiguió la reelección al frente del municipio y el FpV se quedó con cuatro bancas: para Manuel Tofanelli, su esposa Carina Biroulet, Lorena Maguna y Bonifacio González. Sin embargo, para el alcalde no será tan fácil gobernar, ya que la primera minoría la tendrá el Frente Renovador, con diez representantes. Por su parte, Cambiemos, tendrá únicamente a Hernán Santana. Resta esperar quién tendrá la presidencia del HCD.
En San Vicente, la ajustada victoria del radical Mauricio Gómez sobre el K Diego Barrale determinó que Cambiemos, el FpV y el FR sumaran tres concejales cada uno. Así las cosas, a partir de diciembre, los massistas serán ocho, aunque en diferentes bloques; los radicales serán tres; Progresistas ocupará una banca; y el peronismo tendrá seis (tres del saliente Di Sabatino y tres de Barrale). Panorama dificultodo para el novato alcalde.
En San Fernando, a pesar de la cómoda victoria del intendente Luis Andreotti, el bloque del Frente Renovador no contará con la mayoría propia en el Deliberante. Así, a partir de diciembre, el departamento legislativo quedará compuesto por nueve concejales del andreottismo, siete del FpV y cuatro de Cambiemos.
Posse ganó cómodo en San Isidro, pero no tanto como en otras oportunidades. Consiguió seis bancas (cuatro possistas y dos PRO), de las doce en juego. Por su parte, Convocación por San Isidro, el FpV y el FR obtuvieron dos escaños cada uno. La novedad radica en que si los dos macristas no juegan siempre como possistas, el hijo de Melchor Posse no contará con mayoría propia. No le alcanzaría siquiera con el voto doble del presidente del cuerpo.
Luego de la derrota de Curto a manos de Diego Valenzuela, el escenario legislativo será parejo en Tres de Febrero. A partir de los resultados de octubre ingresarán cinco concejales de Cambiemos, cuatro del FpV y tres del FR. ¿Cómo será desde diciembre? El electo alcalde macrista arrancará con diez concejales propios. A los ingresados (Iacovino, Berns, Rodríguez, Bello y Ferreyra) hay que sumar a los aliados Fernando Ramos, Claudia Mormont, Raúl Mazzeo, Diego Achilli y Susana Berisso (los últimos tres, massistas a nivel nacional). En tanto, en el FpV serán también diez, y en el FR, cuatro.
latecla.info
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