domingo, 8 de enero de 2017

EL IMPUESTAZO QUE SE VIENE

(Nota de tapa: periódico El Progreso - enero 2017)
Hubo quórum en el Concejo Deliberante y se trató la Ordenanza Fiscal Impositiva del 2017. La norma fue sancionada con 22 votos a favor (Mayores Contribuyentes y concejales del oficialismo) y 13 por la negativa.


El jefe comunal habla de un incremento promedio del 30 por ciento en la Tasa de Servicios Generales y la Tasa de Seguridad e Higiene en la elevación, pero la nueva Ordenanza Fiscal tiene cláusulas (al final del decreto, casi en «letra chica») que elevarán un 51 por ciento el valor a pagar por los contribuyentes.

En la asamblea de mayores contribuyentes, con un artilugio escondido al final del decreto, el aumento de las Tasas Municipales llegaría al 51% y tocará como siempre a los sectores productivos de Florencio Varela.

El intendente Julio Pereyra anunció públicamente un aumento del 30 por ciento en la Tasa de Servicios Generales (TSG) a partir de enero de 2017, pero en su mensaje no hizo referencia a la suba de los fondos especiales que elevan esa cifra un 9 por ciento, ni a la facultad que obtendrá con la nueva Ordenanza Fiscal e Impositiva para volver a incrementar todos los gravámenes un 12 por ciento más a partir de julio, lo que arroja un IMPUESTAZO anual del 51 por ciento.

Además, quienes tienen un comercio, una industria o prestan servicios en el distrito sufrirán una suba del 49 por ciento en la Tasa de Seguridad e Higiene (TSH).

El proyecto de Pereyra contiene incrementos y nuevos impuestos que no se mencionan o se intentan disimular, como los ya existentes «Fondo de Obras Públicas» y «Fondo para Deportes y Cultura», que suben un 2 por ciento cada uno, sumado a la creación del «Fondo de Auxilio de Emergencias», que carga otro 5 por ciento sobre la TSG y la TSH.

Hasta ahí, el aumento de los impuestos municipales parecía exorbitante.

Sin embargo, para el jefe Comunal no era suficiente y agregó un artículo a la ordenanza, que lo autoriza a aplicar otro incremento del 12 por ciento a partir del 1° de julio.

Según el propio intendente de Florencio Varela, se trata de un «margen preventivo para hacer frente a eventuales desbordes inflacionarios».

Las críticas no se hicieron esperar

El concejal Dardo Ottonello, del Frente Cambiemos, consideró que «Julio Pereyra intenta engañar a los vecinos y los comerciantes para disfrazar un verdadero impuestazo».

«Si existiesen desbordes inflacionarios el año que viene, el intendente tiene el poder para convocar a la Asamblea de Concejales y Mayores Contribuyentes en cualquier momento».

«Yo creo ya tiene incluido en su presupuesto anual ese 12 por ciento que quiere ocultarle a los contribuyentes. Es una trampa», expresó el edil.

Por su parte el Lic. Jorge Di Gioia en su página «El Crítico Digital» hace un análisis sobre las tasas existentes y las nuevas a crear:

«Como primer eslabón de la cadena económica local, tanto en la Tasa de Servicios Públicos, prestados deficientemente, como la Tasa de Seguridad e Higiene que no tiene contraprestación alguna.
O las demagógicas referidas a Seguridad, que tiene que brindarla el Estado y por la cual se abona un doble impuesto; la tasa de Deporte y Cultura que debe fomentar el Municipio con la Tasa general que ya cobra y no los vecinos que no utilizan el servicio y que sirve para ampliar la planta de empleados municipales que ni siquiera son todos del distrito.

O el nuevo invento de la Tasa para un Fondo de Auxilio de Emergencia que ni sabremos adónde va a parar, ni qué clase de emergencias cubriría, de las que también debe hacerse cargo el Estado Provincial o Municipal sin necesidad de inventar nuevos impuestos.

Julio César Pereyra parece haber pasado hace unos años del «Peronismo» al «Comunitarismo».

Figura esta donde todos aportan obligados por uno que hace lo que le parece, en forma demagógica, sin consultas públicas, ni brindar datos en forma anticipada del porque se inventan Tasas ni de cómo y dónde son invertidos los fondos recaudados por cada concepto, burlando el acceso al conocimiento ciudadano de la información pública correspondiente y por ende, la respectiva Ley.

Pero yendo más lejos aún, que es aumentar la presión impositiva sobre contribuyentes que están al límite de su capacidad de pago, lo que claramente es demostrativo de incapacidad, falta de gestión ante la adversidad, ineficiencia e ineficacia en el manejo de fondos públicos y hacer lo mismo que hacen todos los malos políticos: meterle la mano en el bolsillo al ciudadano.»

Periódico EL PROGRESO

No hay comentarios:

Publicar un comentario