Así le dejaron la casa al pobre jubilado de Florencio Varela.
Marcelo Maier, de 71 años, entró a su casa y fue recibido a golpes por mavivientes que, luego de maniatarlo a una silla, lo golpearon salvajemente porque pensaban que tenía más dinero guardado.
Un abuelo de 71 años fue desfigurado a golpes durante un robo en su vivienda de Florencio Varela, donde ingresaron dos delincuentes que lo arrastraron por el piso, lo maniataron a una silla y le pegaron salvajemente en la cabeza pidiéndole dólares, mientras el hombre gritaba “soy jubilado y cobro la mínima”.
El brutal episodio de inseguridad tuvo lugar en una propiedad ubicada en la calle El Hornero al 100, en la localidad de Gobernador Costa, donde vive Marcelo Maier junto a su esposa. El hombre había salido a las 7.30 de la mañana para llevar a su mujer hasta el comercio donde trabaja. Luego, se dispuso a realizar algunas “changas” y, cerca de las 9, decidió volver a su casa para pasar al baño.
Apresurado por la urgencia fisiológica, ingresó a su hogar sin notar nada raro. Pero al avanzar unos metros por un pasillo observó que todo estaba desordenado e, inmediatamente, sintió que lo sujetaron desde atrás. “Me tiraron al piso y comencé a recibir golpes en todo el cuerpo. Me pegaron un culatazo en la cabeza, me arrastraron y me ataron de pies y manos en una silla”, contó a DIARIO POPULAR la víctima.
“Cuando llegué ya tenían todo lo de valor, habían revisado hasta el último rincón y encontraron la poca plata que tenía. Pero me pedían dólares y me pegaban, mientras yo les gritaba que era jubilado y que cobraba la mínima. A esta altura de mi vida sigo laburando para subsistir”, detalló.
Pero los insaciables ladrones querían más y el nivel de violencia se incrementó. “Me dieron piñas por todos lados. Tengo un glaucoma, no puedo ver con uno de mis ojos, y encima me pegaron justo en el que tengo sano. Me lo dejaron a la miseria”, lamentó el abuelo, que, al finalizar la entrevista con este medio, concurrió a una cita con su oftalmólogo por las heridas que sufrió en el globo ocular.
Cuando los delincuentes se fugaron de su vivienda, Maier se arrastró como pudo atado a la silla y, cerca de la puerta, comenzó a gritar para que lo ayuden. De urgencia, fue trasladado por una ambulancia a un centro médico para recibir asistencia. Luego, realizó la denuncia en la Comisaría 2da. de Florencio Varela.
Diario Popular
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