Congoja en el último adiós a Maxi Martínez, el bombero héroe de Varela

En medio de un profundo dolor, los restos de Maximiliano Martínez, el joven bombero varelense de 30 años que murió en el incendio y derrumbe de Barracas, ya descansan desde este jueves en el cementerio de Varela. En la vereda de la cochería Sellas de avenida San Martín 2451 se veían abrazos y ojos llorosos. Las agujas del reloj marcaron las 12. Puntual, la sirena de los Bomberos Voluntarios de Varela, sonó como un profundo lamento. Maxi, pasó los últimos 5 de sus 30 años en ese Cuartel.
Allí se formó como bombero y supo ganarse el cariño de sus jefes y colegas. “Era un gran bombero y una excelente persona”, dijo Marcelo Tucci, su jefe. La muerte lo encontró en su trabajo como Bombero de la Policía Federal, cuando combatía las llamas del incendio del depósito de Barracas y una pared se derrumbó sobre él y otros ocho bomberos y rescatistas. En sus años de servicio en Varela, Maximiliano Martínez participó en incontables incendios y rescates. Era valiente, predispuesto, siempre estaba de buen humor y tenía un gran corazón. Un día, hace dos meses, habló con Tucci. Había decidido dejar el Cuartel de Varela para seguir como profesional en la División Bomberos de la Policía Federal, donde trabajaba desde hacía un año. Se crío en el barrio Gobernador Monteverde, pero vivía con su novia en Wilde, Avellaneda. Soñaba con formar una familia, siempre se lo decía a sus compañeros. “Jefe me voy. No me dan los tiempos entre Varela, la Policía y Wilde”, recordó Tucci que le dijo el joven el día que lo vino a ver por la baja. “Renunció llorando a los bomberos de Varela”, agregó. El cortejo fúnebre de Maxi se puso en marcha un rato antes de las 16. El camión autobomba Westbrook N°25, con el que tantas veces salió en ayuda de los vecinos de Varela, trasladó el féretro del héroe hasta el cementerio local. Sus compañeros y superiores se formaron en fila a la salida de la cochería y la sirena volvió a sonar en un gesto de honor. Esta vez fue la última. La de la despedida. La del hasta siempre. CONDOLENCIAS El jefe comunal de Varela, Julio Pereyra, estuvo presente en la despedida de los restos de Maxi. Conversó con los padres del joven y se puso a disposición de la familia. “Todos estamos consternados por el incendio que ayer se llevó la vida de grandes héroes; nos queda enviar fuerza a los familiares para superar este dolor. Los argentinos estamos orgullosos de los Bomberos que todos los días arriesga su vida por la salvar la de otros”, dijo el intendente.

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