Vecinos de los diferentes barrios del distrito, marcharon en la tarde del viernes hasta las puertas de la Jefatura de Policía, a cargo del comisario inspector Walter García, donde el grito de todos fue uno: seguridad. Y un día los vecinos de Varela alzaron -una vez más- su voz contra la inseguridad. Dijeron basta de robos, asaltos, asesinatos, motochorros, basta de “zonas liberadas”, de entraderas, de ausencia de patrullaje y prevención en los barrios, de policías que custodian supermercados chinos, de falta de seguridad. Unos 300 vecinos de los distintos barrios varelenses, entre ellos Centro, El Cruce, Lomas de Monteverde, 9 de Julio, Bosques centro, Villa Vatteone, Zeballos, entre otros, marcharon en la tarde de este viernes hasta la Jefatura de Policía local, en busca de respuestas ante los último hechos violentos ocurridos en el distrito.
Familiares de Blanca Troncoso, la abuela de Lomas de Monteverde asesinada a golpes por delincuentes que la emboscaron dentro de su casa junto a otras familias y amigos de víctimas del delito. Chicos, mujeres, abuelos, comerciantes, se sumaron a la manifestación que se gestó por las redes sociales (como tantas otras veces) a partir del dolor de una vida arrebata a manos de delincuentes y de haber sufrido algún hecho delictivo. Portaron velas, banderas, pancartas y carteles que pedían “Justicia”, “Perpetua para los asesinos”, “Seguridad”, “Basta de Robos” y hasta contaban: “Mi mamá fue asaltada”. Hubo recordatorios para las víctimas en cada esquina. Frente al Mástil de avenida San Martín y la calle 9 de Julio, recodaron a Blanca Troncoso, a Nicolás del Valle, Florencio Mamani, Marcos Alexis Godoy, Germán Cantero, Rosa Josefa Cotiva y tantos otros. Ellos también estaban “presentes”. La convocatoria fue a las 17.30 en la Plaza San Juan Bautista frente al Palacio Municipal y a las 17.43 la gente se puso en marcha hacia la sede policial a cargo del comisario inspector Walter García. Salieron a la avenida San Martín por la calle Maipú. Un patrullero de la Guardia Comunal les hizo de guía durante todo el camino. Los automovilistas acompañaron la movilización con toques de bocinas a modo de apoyo y otros vecinos se fueron sumando en el trayecto. La gente se agolpó en las puertas de la jefatura en la calle Diagonal Granaderos. No estaba García. Al menos eso dijeron otros policías. “Que de la cara. Ustedes están atrás de las rejas, ¿de qué tienen miedo? Salgan a recibirnos, somos vecinos decentes que queremos vivir en paz. Cuando a ustedes nosotros estamos de su lado, les pedimos que nos cuiden señores”, lanzó una vecina a tres policías (jefes) que se quedaron en el corredor de edificio. Inmutables y lejos de la gente. “Varela es zona liberada, Varela es zona liberada”, fue entonces el grito de las familias. Luego rezaron, hicieron un minuto de silencio por las víctimas que golpeó hasta las lágrimas y cantaron el himno abrazados a una bandera argentina. “Hace 15 días que mataron a Blanca y no hay respuestas. No hay detenidos. Hagan algo por la gente, por este dolor. Queremos justicia”, dijo una joven, familiar de la abuela asesinada. Luego, uno de los uniformados “invitó a pasar” a varios vecinos. Ingresó un grupo que representó al resto. Adentro estuvieron unos 15 minutos. Dialogaron con los efectivos y les pidieron soluciones para paliar el miedo, el delito en los barrios. Pero las víctimas eran ellos. Los policías. Les dijeron que “no tenían suficientes patrulleros, ni personal. Que hacían lo que podían. Que en algunos ya debían dirigirse a la fiscalía”. No hubo precisiones ni compromisos concretos. Muy poco. Solo que el reclamo vecinal “se lo pasarán a García”. Mientras, para la semana que viene -el viernes por la tarde- ya se anunció otra marcha con las mismas banderas, las del dolor por la violencia.
agenhoy.com.ar
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