Le fracturan el cráneo a golpes durante un robo en su casa

Intervino en la investigación del caso la Comisaría 5ta. de Florencio Varela (jurisdicción La Capilla).
Los delincuentes envenenaron a los perros, ingresaron al terreno de la propiedad y esperaron a que el padre se levante para ir a trabajar, momento en el que le pegaron brutalmente. Su esposa, su hija y una sobrina también fueron víctimas de agresiones físicas.


Una familia del barrio El Alpino, de Florencio Varela, fue salvajemente golpeada en su propia casa por cinco delincuentes que envenenaron los perros y no tuvieron piedad ni siquiera con los chicos de un matrimonio, cuyo esposo sufrió dos fracturas de cráneo y no pudo evitar que le roben electrodomésticos, dinero y su camioneta.


En horas de la madrugada, Mario Caro -de 53 años- salía de su vivienda y fue sorprendido por cinco malvivientes, que lograron ingresar al terreno envenenando a los canes que protegían la propiedad, ubicada en la calle 1364, al lado de la granja educativa del barrio El Alpino, en una zona de quintas del fondo de Florencio Varela, donde el movimiento de gente es poco y este tipo de hechos van registrándose cada vez con mayor frecuencia.

Los delincuentes sorprendieron primero a Caro, quien estaba saliendo con la camioneta cargada rumbo al mercado de Flores de Avellaneda. Al pobre hombre lo golpearon brutalmente para neutralizarlo y, de esa manera, acceder a la casa, donde estaban su esposa Valeria, también de 53 años, su hija y una sobrina, a quienes también golpearon en afán de llevarse todo el dinero que había.

Los ladrones actuaron rápidamente y se llevaron el lavarropa, un televisor, las ollas, las garrafas, el DVD, todo el dinero que tenía la familia y la camioneta cargada. De inmediato se dio aviso a la policía de la Comisaría 5ta. con asiento en la zona y al servicio de emergencias que trasladó de urgencia al Hospital Mi Pueblo a Caro, quien poseía dos fracturas de cráneo severas que requirieron cirugía, por lo que su estado era reservado.

Su mujer y las niñas fueron atendidas por los golpes y alguna lastimadura pero nada de gravedad. Más tarde la camioneta sustraída apareció en San Francisco Solano.

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