Este incremento se suma al aumento que rige a partir del 1º de enero del 25% al 40% para el ABL y del 30% para Seguridad e Higiene, más el aumento del 18% al 20% en los Fondos de Obras Públicas y del Deporte y la Cultura, más el nuevo impuesto creado bajo la denominación de Fondo de auxilio para Emergencias que fue del 5%.
La sumatoria de los incrementos fijados a partir del 1º de enero representan hasta un 39% para el ABL y del 37% para Seguridad e Higiene, y a partir del 1º de julio se le sumarìa en ambos tributos este aumento adicional del 12%, lo que lleva los totales al 51% y al 49% respectivamente.
Con una inflación que anualizada a mayo es del 24% y que razonablemente puede estimarse que para todo 2017 rondará entre el 20 y el 22%, con los aumentos que se vienen cobrando desde el 1º de enero se superan holgadamente esos porcentajes, razón por la cual resulta ilógico, abusivo y confiscatorio adicionarle un nuevo aumento del 12%.
En los fundamentos de la Fiscal Impositiva el intendente argumentó la posibilidad de eventuales desfasajes inflacionarios, algo que se sabía que no iba a ocurrir, que no ha ocurrido y que la realidad indica que no sucederá.
Dardo Ottonello
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