El triste episodio ocurrió en la Primaria Nº 29, un establecimiento que ya fue robado cinco veces en lo que va del año. Pese a los reclamos de directivos y padres, el Consejo Escolar no toma cartas en el asunto.
Por quinta vez en el año ingresaron a robar en la Escuela Primaria N° 29 del barrio Pepsi, de Florencio Varela, de donde se llevaron todos los juguetes y golosinas que la comunidad había comprado para agasajar a los alumnos en el Día del Niño.
El jueves pasado, cuando los chicos llegaron a junto a sus padres, había dos patrulleros en la puerta de la escuela.
Los policías presentes no les permitían el ingreso al establecimiento. A los pocos minutos salieron los docentes indignados, algunos llorando, porque fue robado todo lo que habían comprado para festejar y regalarle a los chicos.
Un clima de indignación se apoderó de los pequeños estudiantes, que tuvieron que ingresar a las aulas asumiendo la triste noticia, una de tantas a las que ya están acostumbrados. Es que su escuela es habitual blanco de hechos delictivos, cometidos siempre por “pibes del barrio”.
“Es lamentable, no es la primera vez. Sucede lo mismo todos los años: entran, roban y rompen. Y lo peor es que son chicos que viven en esta zona”, explicó a DIARIO POPULAR la madre de una alumna, que pidió no difundir su nombre por miedo a “lo que está pasando” en el vecindario.
La sospecha sobre quiénes son los autores, está presente. Por lo bajo, la mayoría de los vecinos que se atreven a hablar dicen que fueron “los pibes”. Esos pibes, probablemente, le robaron los regalos a sus hermanos más chicos. En el barrio Pepsi son muchos los hijos que crecen con padres ausentes, con destinos librados a su suerte.
Así lo describe la madre de la alumna que asiste a la Primaria 29: “Son criaturas que conviven en familias de gente que estuvo presa, que tiene una mala vida. Y bueno, los chicos toman el ejemplo”, lamentó con tristeza la mujer, al tiempo que explicó: “Los directivos y docentes han elevado cartas al Consejo Escolar, y padres también. Pero siempre ocurre lo mismo. La escuela tiene un paredón e ingresan por ese lugar. Una vez adentro, rompen puertas o ventanas y tienen acceso a todo el edificio”.
Diario Popular
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