lunes, 25 de marzo de 2013

"VERBITZKY MIENTE, A MI NO ME LO VAN A CONTAR"


El padre Miguel Hrymacz, religiosos a cargo de la parroquia Medalla Millagrosa de esta ciudad y un sacerdote muy comprometido con los humildes y la parte social, se refirió a la consagración del ex obispo Bergoglio como Papa Francisco y a otros aspectos de la actualidad y el pasado que él le toco vivir. El reconocido cura expresó que la consagración del Papa fue «una gran alegría para todos los católicos, que es argentino. Lo conozco, sé que es un hombre extraordinario, de Dios y del pueblo. Lo sé porque lo conozco desde hace mucho de años.

 No pensé que lo iban a elegir y he tenido diversos contactos con el actual Papa inclusive cuando se consagró al nuevo obispo de Quilmes. Monseñor Tissera. Siempre fue (Bergoglio) un hombre muy campechano en su forma de ser. Se la obra que hizo en Buenos Aires, recorriendo las villas de emergencia, los barrios más pobres, tomando mate en sus casas, ayudando a medio mundo y sin que nadie le pidiera o le dijera nada. Todo lo hacía con un bajo perfil», señaló Miguel en una entrevista con LA COLMENA. Agregó que «no era un cura cualquiera eso lo hacía siendo el Primado de la Argentina y un cardenal. Hablaba con todos, a cualquier hora y en la calle. Se destaco po r su contra de la explotación de mujeres en los talleres, apoyando a el grupo LA Alameda y hasta iba a bendecir a algunos chicos viajando en colectivo o en subte. Creo que es un tipo extraordinario que va a traer una renovación en la Iglesia, cambios. Los gestos iniciales así lo hacen prever, que lo mostró como un tipo transparente, honesto, que vive pobremente, en una pobreza franciscana». Recordó que en el año 2012, llegó a Quilmes para casar a una pareja de esa ciudad que le había pedido y Bergoglio, ahora su Santidad, llegó en tren y se fue caminando casi 10 cuadras hasta la catedral de Quilmes, pese a que ya era Cardenal. Cuando apareció los presentes no salían de su sorpresa porque habían llegado caminando. Y al terminar algunos se ofrecieron a llevarlo en auto y él se negó terminantemente, hasta accedió hasta que lo llevaran a la estación de trenes. Destacó su humildad y también «la actitud que tuvo con la presidenta, pese a que le había pedido 14 veces para que lo atendiera, que ni se las concedió ni lo atendió. Y ni siquiera le respondió». Consultado por qué creía que la jefa de estado habría cambiado en su actitud, el Padre Miguel respondió: «no le quedaba otra. Es la presidenta del país donde surgió el Papa, tenía que ir a verlo y eso demuestra la grandeza del Sumo Pontífice., agregando, que «hasta le dio una audiencia antes de asumir como Papa, cosa que casi nunca se estila. Porque casi nunca se recibe previamente a un jefe de Estado. Hasta la invitó a almorzar». Destacó que la imagen y personalidad del Papa «ha impactado fuertemente en toda la humanidad y que se le valora su humildad y su permanente compromiso con los pobres y los más humildes». Resaltó que ahora para él «lo importante es que Francisco realice un cambio importante en el Vaticano» y «creo que va a poder hacerlo, porque tiene carácter, aunque parezca que no mata ni una mosca». Miguel puntualizó que por la asunción del Papa, «el gobierno nacional debería haber dado asueto, un feriado nacional, todo el día, ya que se dan tantos asuetos, porque es un hecho histórico y que marca que se consagró un Papa argentino» Se mostró preocupado porque «inclusive hay un grupo kircherista en contra, estoy hablando de Horacio Verbitsky, del director de la Biblioteca Nacional Horacio González, unos cuantos hablaron mal. Y también lo he dicho en la misa del pasado domingo. Es una barbaridad. Quizás porque Néstor Kichner decía que Bergoglio era el jefe de la oposición Y sabe por qué, porque él decía las cosas que veía mal siempre, igual que yo, que las decía estuviera Memen, Cristina, Alfonsín. La Curia no puede callarse ante cualquier partido político. Como obispo no podía callarse la boca ante las injusticias y la corrupción». Refutó a los conceptos vertidos por el filósofo González sobre la asunción del papa y también relativizó que se dijera que el Papa era peronista, aunque admitió que «cuando era seminarista y un cura joven militaba en el peronismo». La realidad es que es un tipo muy coherente en todo lo que dice. Al aludir al contraste entre los mensajes de austeridad y humildad del Papa, con el accionar de algunos políticos, el sacerdote señaló que eso se daba permanentemente. Al referirse a la presencia del intendente Pereyra que fue en la comitiva oficial al Vaticano «supe que fue porque es el jefe de los intendente, de la FAM y por eso la presidenta lo llevó». Lo eligió la presidenta.» Y «bueno, si la presidenta lo eligió, estuvo entre los elegidos»…, manifestó. También destacó que le salvó la vida a dos curas jesuitas, Jalics y Yorio durante la dictadura militar y que era «mentira que los haya entregado, como dice Verbistsky», «pues yo conocí personalmente a Yorio y la realidad es que Bergoglio los protegió y los hizo salir del país». «A mi no me la van a contar –subrayó-. Yo padecí esa persecución durante la dictadura y estoy vivo por la protección de Dios, y hay otros curas que no pueden contar», sintetizó el padre Miguel. Debe señalarse que estando al frente de la parroquia San José y Santa Cecilia, en 14 y 135, de Berazategui Oeste, el cura fue perseguido y obligado a dejar ese templo por presión de los militares de entonces, bajo amenazas, y recién tiempo después pudo estar a cargo en la parroquia Medalla Milagrosa varelense, donde desde hace años realiza una gran obra en beneficio de los más humildes y los desprotegidos..

SEMANARIO "LA COLMENA"

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