lunes, 27 de enero de 2014

Temor en el Cruce Varela por aumento de robo a jubilados

En el último de los hechos, dos sujetos se hicieron pasar por remiseros que traían un regalo para la nieta de la víctima. Los delincuentes se alzaron con un botín de 30 mil pesos y artefactos electrónicos Temor en el Cruce Varela por aumento de robo a jubilados En la zona del Cruce Varela aumentaron los asaltos a jubilados con el llamado Cuento del Tío, una modalidad que utilizan los delincuentes para ganarse la confianza de los adultos mayores y luego ingresar a sus casas. El último robo de esta seguidilla se conoció en las últimas horas, cuando dos hombres se presentaron en una casa ubicada en Balcarce, entre Gorriti y Ameghino, donde vive un matrimonio con una hija y los padres de las esposa.
Según trascendió, dos sujetos tocaron timbre en la propiedad y fueron atendidos por el abuelo de la familia, a quien le dijeron que ambos eran empleados de una remisería de la zona y que más tarde volverían con un regalo para su nieta, con motivo de su cumpleaños. El anciano nunca sospechó lo que estaba por suceder y les entregó el número de teléfono de la casa, ya que los falsos remiseros se lo pidieron para avisarle la hora en la que volverían. Horas más tarde, los delincuentes -que se movilizaban en un VW Fox color blanco- regresaron al lugar con una enorme caja, la cual simulaba ser el obsequio prometido. Tocaron timbre nuevamente, pero esta vez los ancianos no estaban sólo, ya que la pareja había arribado minutos antes. Sin cuestionamientos, el jubilado les abrió el portón a los dos sujetos para que ingresen el paquete, pero al hacerlo extrajeron sus armas e hicieron ingresar a otros tres sujetos más. Una vez adentro, redujeron a toda la familia y comenzaron a buscar dinero. Constantemente bajo amenazas de muerte, le exigían al jefe de hogar que confiese el escondite de los ahorros, a lo que respondía no tener efectivo guardado en la casa. La situación se puso violenta y el hombre terminó por confesar dónde tenía la plata. Los asaltantes se alzaron con un botín de 30 mil pesos, artefactos electrónicos y otros objetos de valor, que cargaron en el vehículo en el que llegaron y -luego- huyeron a toda velocidad. Los miembros de la familia quedaron encerrados en un cuarto hasta que llegó la hija del matrimonio y logró liberarlos. Tras este hecho, los vecinos de la zona hicieron circular un comunicado para no caer en esta trampa. De esta manera, concientizan a los propietarios, en especial a los ancianos, para que no le abran las puertas de sus casas a extraños y, en caso de notar algo extraño, llamar a la policía.

Diario Popular

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