Violenta entradera en Florencio Varela

Malvivientes estaban encapuchados y con guantes
Fue Primicia
Esto le sucedió a un vecino cualquiera, a gente como usted, como nosotros, le paso a ciudadanos comunes que no son custodiados por móviles de policía, esta gente no tiene un patrullero en la puerta de su casa. ¿Sabe por qué? Porque son vecinos sin coronita, entonces la departamental de Quilmes no indica que deben estar cuidados, no indican en el orden del día custodias estáticas ni dinámicas…. Vergonzoso…

Tres malvivientes encapuchados y con guantes redujeron a una familia, los precintaron, amenazaron y golpearon, en un hecho que duró más de noventa minutos.
El matrimonio y sus tres hijos fueron sorprendidos alrededor de las 4 hs. de hoy en su vivienda ubicada en la calle Guayaquil entre Braille y Ameghino del barrio Martín Fierro de la zona conocida como “Cruce Varela”.
Los sujetos cortaron una reja que da a la parte del patio trasero, ingresaron a la propiedad, llegaron a los dormitorios.
Los tres estaban encapuchados y con linternas.
Los dos nenes más pequeños no se despertaron, el hijo mayor de 16 años fue sacado de la cama, golpeado y llevado al dormitorio de sus padres donde todos fueron precintados.
Más de noventa minutos duró el calvario.
Robaron todo lo que pudieron, ropa, celulares, algunos anillos, cadenas, una play, y algo de plata.
Pero los delincuentes querían más, y se pusieron agresivos.
Golpearon en reiteradas oportunidades al jefe de la familia, quien entre golpe y golpe les repetía que no tenía plata, que lo que tenían ya lo habían agarrado.
Revisaron todo lo que pudieron, iban, venían, volvían a exigir dinero, retornaban los golpes con la amenaza constante que si encontraban más plata la cosa terminaba mal… hasta amenazaron con llevarse a uno de los chicos.
Al final, los malvivientes se marcharon.
Las victimas lograron llegar hasta la planta baja, tomar una tijera y cortar los precintos.
Luego llamaron a la policía.
Interviene la comisaria 3ra del partido.
El menor de los nenes, hoy a la mañana notó que no tenía su mochila del jardín y le dijo a su mamá “No llores más, mejor pensemos cositas lindas, los malos ya se fueron”.

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