sábado, 10 de septiembre de 2011

La previa de Varela Jr.

Solamente dejamos afuera de esa clasificación a los tres de arriba, San Pedro, Varela y Las Cañas, por el nivel y la regularidad que vienen demostrando en lo que va del certamen, aunque matemáticamente también tienen chances de caer en la zona de peligro. Por ahora parece difícil, pero esta Reubicación da para todo.


Este campeonato es increíble. Con decir que desde el cuarto equipo hasta el último están metidos en una misma pelea a todo o nada para intentar sellar su permanencia en el Grupo III para la próxima temporada, ya es suficiente para graficarnos la intensidad con que se están viviendo estos tramos decisivos del año. Equipos como Albatros, Areco, San Marcos y Zárate no pueden relajarse ni permitirse quitarle la vista a la zona del descenso. Y eso no es poco decir.



Albatros jugará este sábado uno de los partidos más importantes del año. El XV de La Plata se encuentra en una situación incomodísima; es la primera vez en la temporada que deberá afrontar un partido estando en zona de descenso, con la presión lógica que esto implica. El rival será Hebraica, un equipo que acumula siete derrotas en fila, que ya perdió varios partidos clave ante rivales directos y que no encontró respuestas ante escuadras que vienen de jugar la primera ronda en Grupo III.



En el humor de Albatros jugará un papel más que importante la actuación que pueda tener mañana Chascomús. Si, lo que haga el Albirrojo en su visita a Luján podría cambiarle la vida a los platenses, y viceversa. Por fin, después de tanto lucharla de atrás, el Lagunero se ubicó entre los ocho de arriba y ahora tendrá que defender su territorio, algo nada simple, y menos aún frente a un conjunto como el lujanero, que se sabe capaz de lograr el ascenso, pero al que todavía le está faltando una vueltita de tuerca para pegar el salto. Quizás, un éxito (con una buena actuación incluida, claro) ante Chasco le sirva para terminar de darse cuenta que está para más.



En esa lucha que no entiende de carteles ni pasados mejores, nos topamos sorpresivamente con el arequero. Preso de su irregularidad, acentuada en las últimas fechas, Areco se cayó de la vanguardia y quedó con la cornisa a muy poquitos metros de distancia. La zona de descenso lo tiene al alcance de la mira: solo cinco puntos lo separan de Albatros. Es una diferencia mínima que se puede extinguir si este sábado da un nuevo paso en falso, de local, ante San Pedro, uno de los más fuertes del campeonato. El Biguá todavía se está lamiendo las heridas por haber caído por una exigua diferencia en el choque con Las Cañas que lo hubiese depositado en lo más alto de la tabla de posiciones. Con la espina todavía clavada en el pie, el equipo de Peto Ramognino saldrá a la cancha pensando en desquitarse para no perder de vista la punta.



San Marcos tampoco puede hacerse el distraído cuando escucha la palabra “descenso”. Los de Monte Grande se salvaron de quedar en una posición comprometidísima al rescatar cuatro puntos en la fecha pasada ante Luján (lo ganaron 39-38), sino hoy estaríamos hablando con un tono más urgente. El duelo de este sábado con San José estará cargado de emotividad, porque si los dueños de casa pierden quedarán peligrosamente cerca de los seis de abajo, mientras que a la Gamuza, fortalecido por su reciente primera victoria en el R III, no le quedan muchas balas y sabe que no puede ceder ni un solo punto más.



En el Oeste también habrá muchas cosas en juego. San Miguel tiene que ganar para no perder las esperanzas y Zárate para dejar de sentir de cerca el fantasma del descenso. Los Santos vienen de quedarse con las ganas ante Varela y de derrotar en un partido cerradísimo a Los Pinos. El de mañana podría ser un partido bisagra. Los zarateños se dieron un mimo al golear con increíble contundencia a Albatros por la octava fecha. Ese éxito los sacó del ojo de la tormenta, pero todavía no es momento para cerrar el paraguas. Una nueva victoria les daría más aire.



El escolta llega con el ánimo intacto después de recuperar el paso ganador frente a San Miguel con un triunfo que les permitió borrar de su mente bastante rápido aquella derrota poco esperada que les había propinado Albatros dos semanas atrás. Para el Verde son días de mucha ilusión: quedan 25 puntos en juego y están a 14 de Albatros. No hace falta decir lo que significaría una nueva conquista en su visita a Costanera Norte. Vicente López también está sacando cuentas, pero los números no le dan tan bien como a Varela. Los de la ribera todavía tienen amplias chances de conseguir el ansiado ascenso, pero para eso deberán hacerse fuertes mañana en uno de los partidos más importantes para ellos en los últimos meses.



El único encuentro en el que habrá dos equipos sonrientes será en el que jugarán Las Cañas y Los Pinos. Uno es el puntero indiscutido, más aún después de ponerle los puntos a su ex escolta, San Pedro, en un cruce picantísimo. Los de Cañuelas quieren seguir por el buen camino para jugársela en los Playoffs por el ascenso a Segunda. Del otro lado estará la banda de Pilar, feliz de la vida con la victoria sobre Vicente López que los salvó de caer en zona de descenso. Es cierto que no están tan holgados como hace unas semanas, pero saben que vienen por la buena senda y eso les basta para no perder de vista el objetivo.


Desde Abajo Rugby

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