El Verde resurgió, subió al segundo puesto, acortó distancias con el líder y dejó en claro que no tiene en sus planes atravesar el suplicio de los cruces eliminatorios de Grupo IV para confirmar su permanencia en el G III. Si, Varela logró todo eso al vencer de local a San Miguel, que venía revitalizado por el triunfo de la semana anterior frente a Los Pinos, aunque los de Florencio Varela le cerraron la puerta a la ilusión de acercarse un poquito más al noveno puesto.
En la Reubicación del GIII nadie está a salvo ya que la caída a la zona de descenso de Albatros, la remontada de Chascomús, la derrota que dejó a Areco al alcance de los puestos de peligro y las durísimas batallas que se vienen le dan una cuota de dramatismo impensada.
El sistema actual implementado por la URBA le da un dramatismo singular a la definición del R III, que está picante como pocas veces.
Si bien podríamos iniciar el análisis con el triunfazo del líder Las Cañas sobre el escolta San Pedro, la intensidad de la pelea de abajo nos obliga a cambiar el foco una vez más. El fin de semana se dieron dos resultados centrales. El primero fue la tremenda victoria (con sabor a batacazo) de Atlético Chascomús, de local, frente a Areco. El Lagunero no dejó lugar para las dudas, le ganó con muchísima autoridad a la visita, sin flaquear en ningún momento, y se dio el lujo de sumar un bonus importantísimo para salir de la zona roja por primera vez en todo el Reubicación. Chasco logró su cuarto éxito seguido, tres de ellos ante rivales que, en los papeles, eran superiores, aunque ya nadie tiene nada asegurado. Esta fue la escalada del Lagunero, fecha por fecha, en la clasificación del R III: 12°, 14°, 14°, 13°, 10°, 9°, 9°, 8°. Mejor imposible. En tanto, el arequero cayó por segundo sábado consecutivo y quedó en una posición incómoda: está sexto, a cinco unidades del descenso. La señal de alarma ya se encendió en Areco. Mejor prevenir que curar.
La principal víctima de esta racha híper positiva de Chascomús es Albatros, cuya irregularidad también le tendió una trampa letal. La escuadra de La Plata perdió sin atenuantes en su visita a Zárate y retrocedió a la novena posición. Albatros quedó en zona de descenso, y eso nos poco decir para un equipo que en 2010 jugó en Grupo II pero que ahora está con la soga al cuello en Tercera. Los platenses son una verdadera incógnita: le ganaron a Las Cañas, cayeron con Los Pinos, bajaron a Varela, se llevaron un susto bárbaro con San Miguel… la irregularidad es su principal enemigo. La pelea mano a mano con Chascomús promete ser intensísima. En este paso en falso de Albatros jugó un papel importante el excelente trabajo de Zárate, que logró consolidar de local su incipiente recuperación. El Ombú ganó muy bien y se alejó de los puestos de peligro, pero tampoco puede relajarse.
En segundo plano quedaron otros dos resultados con una incidencia directa en la pelea por la permanencia y el ascenso. Dos equipos que integran el lote de los ocho de arriba, San Marcos y Los Pinos, consiguieron sendas victorias de peso ante dos escuadras que están haciendo todo lo posible por quedar entre los primeros ocho, Luján y Vicente López.
En ambos casos, los triunfos fueron por escasísima diferencia y pusieron de relieve la paridad existente entre los distintos contendientes de ambas veredas. El lujanero estuvo ahí nomás de torcer el brazo de San Marcos, le faltó muy poquito para quedarse con su tercera victoria al hilo, que lo hubiese dejado a un puntito de Albatros. Pero no le alcanzó y el sábado próximo se jugará una parada importantísima ante Chascomús.
A Vilo tampoco le faltó mucho para superar a Los Pinos. El equilibrio en el marcador lo dice todo. Los de Costanera Norte dejaron escapar una oportunidad clarísima para sumar puntos vitales que los hubiesen arrimado a la frontera entre el ascenso a Tercera y el retorno a los Playoffs de Cuarta. Por su parte, Los Pinos recuperó la sonrisa después de perder en la séptima fecha ante San Miguel.
Abajo de todo, en el fondo de la tabla, los equipos menos favorecidos por los resultados se sacaron chispas en Pilar. San José volvió a la victoria después de una eternidad: acumulaba once derrotas seguidas y su último festejo había sido el 5 de junio, en Garín, frente a Lanús. Tres meses tuvieron que pasar para que la Gamuza dibujara una sonrisa en su rostro después de tantas pálidas. De todas maneras, la ilusión de zafar de los Playoffs de Cuarta sigue estando muy lejos. El SHA también mira el sueño del ascenso a la distancia, porque con esta derrota se alejó un paso más. Y eso que Hebraica había arrancado con un gran triunfo en el debut ante Los Pinos... hoy los roles se invirtieron ¡Y de qué manera!
Ahora sí, una vez relatados los acontecimientos que marcaron el pulso de la octava fecha en los peldaños más calientes de la tabla, podemos referirnos al duelo que tuvo en el centro de la escena al puntero y el escolta. Las Cañas y San Pedro brindaron un espectáculo emotivo que se resolvió por muy poca diferencia en favor del líder, aunque podría haber sido para cualquiera de los dos.
Rugby y Fan
martes, 6 de septiembre de 2011
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