La populosa barriada pide mejoras y justicia por un joven atropellado. Desde el martes 23 cuando Diego Cortez (26) perdió la vida al ser embestido por una camioneta que se dio a la fuga, se han generado cuatro cortes de la ruta. El último fue ayer en horas de la tarde. Denuncian que le han cortando internet para que la manifestación no salga en las redes sociales. Esperan la presencia de las autoridades pero no han logrado ser escuchados. ¿Por qué no hay dialogo ante el reclamo de los contribuyentes? Hablan los familiares del joven Cortez, víctima de un asesino al volante. La trágica muerte de Diego Cortez, de 26 años, padre de un bebé de 6 meses, empleado de Alpargatas, sobre la desgastada y abandonada Ruta 36, en el ingreso al barrio La Rotonda, de Florencio Varela, en horas de la tarde-noche del martes 23, fue la gota que colmó el vaso de la paciencia vecinal. La Rotonda es un barrio golpeado por la contaminación industrial. Un barrio que se encontró en abril de 2006 inmerso en la declaración de emergencia ambiental decretada por el gobierno de la Provincia de Buenos Aires, cuando el plomo de una fáqbrica de la zona comenzó a invadir la sangre de los pibes del lugar. Ahora la sangre de los vecinos está invadida de bronca, de indignación ya que la muerte de Diego Cortez sobre la cinta asfáltica de la Ruta 36, ha desembocado en el pedido de justicia y de mejoras. El triste episodio se generó cuando el joven Cortez iba a la visitar a su poadres tripulando una moto de 125 centímetros de cilindrada. Cortez cruzaba la Ruta 36 cuando una camioneta avanzaba de norte a sur, y violando el semáforo del cruce con Juana Padilla de Azurduy, lo atropelló con un hierro que sobresalía de la caja. El violento golpe hizo blanco en la nuca de Cortez, en el cayó al pavimento y dejó de existir en el acto. La camioneta no se detuvo. Se dio a la fuga y ahora la pesquisa parece estar estancada para encontrar al asesino al volante. Los vecinos salieron a la ruta. Ayer se cumplió la cuarta jornada de protesta con quema de gomas y la espera de que alguna autoridad se haga presente. Suena casi inentendible que con los tiempos electorales que se viven. Desde el área de seguridad municipal nadie se acercó. Ayer a media tarde Varela al Día estuvo en el lugar y habló con los familiares del joven Cortez. Estaban sus hermanos, su esposa Mariana, quien tenía en brazo a su hijito Tiago; el padre del joven, Luis Cortez y un tio del muchacho, quien se presentó como Luis Lezcano y llevó el relato de los hechos. “Pedimos justicia, que las autoridades nos representen, porque acá no ha venido nadie, solo el comisario de Bosques y por obligación. No tenemos ni cámara de seguridad para poder ver la camioneta pasar. Pero las demás cámaras que están sobre la ruta no funcionan. No tenemos nada. No se sabe quien fue. Se sabe que llevaba una escalera en el techo. Aparte a esa hora estaba oscuro y no se pudo ver nada”, dice el tio Lezcano quien se siente al igual que los demás vecinos marginado y no ser atendido. “Aca vienen cuando necesitan los votos. Mire a lo que han llegado: nos han cortado el servicio de banda ancha de internet para que el caso no salga por las redes sociales. Nosotros tenemos el servicio de la Cooperativa Tres Límites. Tenemos teléfono pero no internet. Llamamos a los medios y no vienen. Solo ustedes se han hecho presente. Queremos que esto se sepa. Pedimos luces, mejoras en la ruta y que se reparen los semáforos”, destacó Lezcano. Los vecinos entregaron una copia del petitorio. Al mismo tiempo que se hizo presente quien dijo ser el jefe de calle de la Comisaría Cuarta. El policía dijo desconocer la existencia de una causa judicial que desemboque en el desalojo de la ruta con la obvia represión. Los vecinos dejaron en claro que no piden planes, piden mejoras: luces, bacheo en la darsena de colectivos, que los semáforos funcionen para poder cruzar tranquilos la veloz ruta. Dicen que de un lado al otro van chicos de las escuelas. Piden que se pinten sendas peatonales, las que se están haciendo en los barrios de Varela. No es mucho lo que piden. Lo destacan en el escueto petitorio y de paso un párrafo para la seguridad: “Un patrullero que patrulle y no que esté mensajeando en la esquina de Padilla o durmiendo mientras en la entrada de nuestro barrio roban sin nadie que custodie” La promesa de manifestar ante la comuna y las fiscalías, fue hecha en el cierre de la nota.
VARELA AL DIA
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