Cayó una banda que hacía entraderas en La Plata. Su cabecilla vivía de lujo, entre obras de arte y tecnología.

 

Así es la lujosa finca del líder de una banda que hacía entraderas
La Plata

En la quinta, ubicada en El Pato, había un arsenal y gran cantidad de elementos robados. Detuvieron a los dos cabecillas de la organización y a seis integrantes. El audio que los delató.

“Herramientas tengo y ganas me sobran”. La frase podría adjudicarse al postulante a un trabajo en una obra en construcción o un taller, pero nada está más alejado de la realidad. Quien la dice es uno de los ocho integrantes de una banda dedicada a las entraderas en la zona de La Plata y que fue desbaratada a partir de las comunicaciones que los delincuentes mantenían para marcar casas y cometer los robos.


La banda cayó luego de una investigación de más de tres meses, que incluyó el cruce de llamados entre sus integrantes. Gracias a las comunicaciones interceptadas por la policía, se logró identificar y detener a los dos cabecillas de la organización. Cada uno de los jefes tenía su rol definido: uno se encargaba de la logística necesaria para cometer los robos, mientras que el otro “marcaba” las casas elegidas como blanco y “seleccionaba” a los cómplices más adecuados para cada operación. También se detuvo a seis de sus cómplices.


A partir de la escuchas, los investigadores llegaron hasta la base de operaciones de la banda: situada en la lujosa quinta que uno de los dos jefes de la organización tenía en El Pato, en el partido de Berazategui. Se trata de una finca con una enorme pileta de natación, un quincho, una casa de huéspedes (en construcción) y un depósito en el que guardaba las armas y parte de lo que robaban. Todo era monitoreado por un circuito cerrado de cámaras de seguridad.


Cuando allanaron la quinta de este cabecilla (que tiempo atrás se había fugado del penal de Marcos Paz), los efectivos de la Delegación de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas y Crimen Organizado de La Plata hallaron todo lo necesario para cometer las entraderas: handys con la frecuencia policial, herramientas (mazas, cortafierros, barretas y precintos para atar a las víctimas), una máquina de contar billetes, un chaleco antibalas con la inscripción de la Policía y un dron. También había unos 700 gramos de cocaína.


El otro líder de la banda, quien también fue detenido, es un hombre conocido como “El Nono”. Era el encargado de elegir las casa que iban a ser robadas, de seleccionar a la gente para cometer las entraderas y quien analizaba las cámaras de seguridad y rutas de escape en cada ocasión.



Además de la quinta en El Pato, los investigadores allanaron otras nueve propiedades: cinco en Florencio Varela, dos en Quilmes y dos en Lanús.


En total, la Policía secuestró un verdadero arsenal. Los delincuentes tenían dos fusiles 7.65 de alto poder, dos carabinas, un rifle con mira telescópica, cinco pistolas (9 milímetros y calibres 22 y 40), cinco revólveres (del 38 largo y 22 largo), tres escopetas 12/70, un pistolón de dos caños y una gran cantidad de municiones.


Pero eso era sólo parte de la logística de la banda. También se encontraron gran cantidad de elementos robados en las entraderas: 10 mil pesos, diez televisores plasma, obras de arte, álbumes con estampillas de colección, estatuas y antigüedades valiosas, cinco autos de alta gama, una moto, un telescopio y una gran cantidad de juguetes sexuales.

clarin.com