Se trata del edil Juan Cruz Daffunchio, quien es un intocable en el Frente para la Victoria. De opositor a aplaudidor de Julio Pereyra. Cientos de afiches colgados en columnas y semáforos marcan una doble concepción de quien debe preservar el medio ambiente. Las normativas son claras y no respetadas.
La contaminación visual -dice la enciclopedia Wikipedia en https://es.wikipedia.org/wiki/Contaminaci%C3%B3n_visuales -es un tipo de contaminación que parte de todo aquello que afecte o perturbe la visualización de algún sitio o rompan la estética de una zona o paisaje, y que puede incluso llegar a afectar a la salud de los individuos o zona donde se produzca el impacto ambiental. Es un problema que nos está afectando a todos.
Se refiere al abuso de ciertos elementos "no arquitectónicos" que alteran la estética, la imagen del paisaje tanto rural como urbano, y que generan, a menudo, una sobreestimulación visual agresiva, invasiva y simultánea.
Dichos elementos pueden ser carteles, cables, chimeneas, antenas, postes y otros elementos, que no provocan contaminación de por sí; pero mediante la manipulación indiscriminada del hombre (tamaño, orden, distribución) se convierten en agentes contaminantes.
Una salvaje sociedad de consumo en cambio permanente que actúa sin conciencia social, ni ambiental es la que avala (o permite) la aparición y sobresaturación de estos contaminantes. Esto se evidencia tanto en poblaciones rurales como en aglomeraciones urbanas de mayor densidad. Pero lógicamente es en las metrópolis, donde todos estos males se manifiestan más crudamente.
La simultaneidad de estos estímulos a la que se ven sometidos, por ejemplo, los automovilistas, pueden llegar a transformarse en disparadores de accidentes de tránsito. Dado que pueden llegar a generar distracción, e incluso a imposibilitar la percepción de las señales indicadoras de tránsito. Esta situación, inevitablemente, actúa también en detrimento de los mismos medios de comunicación, mimetizando los diferentes signos y señales a que se somete a los individuos, camuflándose mutuamente y perdiendo fuerza la clara lectura del mensaje.
Una ciudad con contaminación visual denota un estado con falta de política para la ciudad, con una regulación deficitaria o inexistente del espacio público y privado. Así las ciudades se convierten en escenarios de millones de decisiones individuales despreocupadas por su entorno, que conviven formando un caos difícil de asimilar por el ojo humano.
EN FLORENCIO VARELA
Absolutamente todo lo antes manifestado, se ajusta a nuestra ciudad, como a otras de un conurbano que crece sin orden ni políticas, en procura de mejorar el medio ambiente. Sin embargo, cuando hablamos de nuestro municipio, se debe decir que las herramientas para frenar el avance de la contaminación visual, están, pero no se utilizan.
Quienes han viajado por el mundo regresan asombrados a Varela al ver ciudades ordenadas, con limpieza en sus calles y hasta campañas políticas ejemplares. De esto el jefe comunal ha hablado con sus colaboradores más cercanos, pero esas premisas no se cumplen. La contaminación visual sigue creciendo y sin que se tomen medidas. ¿Por acción u omisión? Por ambas cosas. Veamos.
Varela al Día no pretende gobernar con sus artículos, pero sí apoyar a la gestión marcando algunas cosas que se podrían modificar sin invertir millones de pesos. En noviembre de 2008, hace 8 años, publicábamos: "Aportamos una idea y si algún concejal o funcionario quiere responder, lo publicaremos. Algo se tendrá que hacer, porque asi no se puede seguir. La zona céntrica de Florencio Varela, como la de otros distritos vecinos, es tierra de nadie. Cualquiera viene y pega afiches de todo tipo y tamaño; carteles de publicidad en columnas de alumbrado público, pasacalles y otros elementos de publicidad. Todo vale y no hay reglas que marquen la cancha. Con levantar la vista y observar se ve con más notoriedad que la contaminación visual no ha decrecido por medidas adoptadas, todo lo contrario”
SEMAFOROS
El viernes de la semana pasada la consulta periodística fue hecha por Varela al Día en Inspección General del municipio.
-Buenos días, la intención nuestras es conocer qué ordenanza prohíbe hacer publicidad y propaganda en columnas de alumbrado y semáforos. Tenemos cientos de carteles de nuestra empresa para columnas y semáforos.
-Eeehh, no se puede...
-¿Nos podrían dar una copia de la ordenanza que lo prohíbe?
-Tiene que hacer una carta dirigida al intendente para que le dé una copia de la ordenanza. Solo podemos darles los números de Ordenanzas…
DIRECCION DE SEMAFOROS MUNICIPAL
-Los semáforos tienen carteles políticos colgados. ¿Por qué no son retirados? Esto es contaminación visual.
Empleado: "Si, es verdad, pero no tenemos ordenes de retirarlos"
DIRECCION DE TRANSITO MUNICIPAL
-¿Qué normativa permite que en los semáforos cuelguen carteles de Cristina Fernández que llevan al firma de concejal Juan Cruz Daffunchio?
-Ninguna normativa los permite. Al contrario-dice el responsable al momento de nuestra consulta y busca en su escritorio la Ley de Tránsito 24449- Mire éste artículo. Es el 26 de la Ley de Tránsito. Prohíbe todo cartel sobre un semáforo”, dijo.
AMBIENTE
Contacto telefónico con la abogada Beatriz Domingorena, secretaria de Ambiente de la Municipalidad de Florencio Varela.
Domingorena: "Es verdad, hay mucha contaminación visual y por esto se ha creado una dirección municipal en mi secretaria para atacar esto. Estamos trabajando en esto. Vamos a tener novedades en poco tiempo"
EL CONCEJAL
Juan Cruz Daffunchio es concejal del Frente para la Victoria, pero asumió en 2009 como acérrimo opositor a Julio Pereyra por el espacio de Nuevo Encuentro. A no más de dos años se pasó el Frente para la Victoria y el año pasado fue reelecto en ese espacio. Es el actual presidente de la Comisión de Medio Ambiente del Concejo Deliberante y como tal debería estar preocupado por el avance de la contaminación ambiental, en todos los órdenes. Uno de ellos es la contaminación visual. Sin embargo, Daffunchio, llevándose por delate toda las normativas, inclusive la Ley Nacional de Tránsito, hecho por demás grave por su condición de legislador, al que entre todos le pagamos un muy buen salario, se ha dedicado a colocar en cada semáforo, en cada columna de alumbrado, un horrible cartel con la imagen de Cristina Fernández. Han sido dos. El último con la leyenda de "luche y vuelve". Esta bizarra campaña, porque aún no hay campaña electoral, no se ve en otros municipios. Se la ve en Varela y no hay funcionario municipal que ponga las cosas en su lugar, porque Daffunchio fue un mártir del neoliberalismo, que por años nos cortó Varela con sus piquetes. Y no hay quien no deje de preguntarse de donde salen los recursos para semejante campaña. Hay más de un millar de carteles colocados en luminarias y semáforos, de todas las avenidas más importantes de Florencio Varela, incluida la Ruta 36. Cada uno no baja de costo, con mano de obra para su colocación, de los $100. De la dieta del concejal es seguro que no sale. Pero aquí lo más preocupante es que un concejal no respeta las normas establecidas y como dice wikipedia: "Una ciudad con contaminación visual denota un estado con falta de política para la ciudad" Daffunchio, como concejal y presidente de la Comisión de Medio Ambiente, debería tener algo en claro. Por lo visto, no lo tiene.
HERRAMIENTAS LEGALES NO RESPETADAS
Las herramientas que tiene el municipio para atacar la contaminación visual, de todo tipo, no fueron creadas en los últimos días. La Ordenanza madre data de Julio de 1978 y lleva por Número el 730. En el artículo 2, inciso "C" , se señala: "No se permitirá la colocación de carteles de propaganda comercial en edificio públicos; plazas; monumentos; arboles, columnas de alumbrado público y postes de teléfonos; pizarra sueltas y pasacalles, en todo el ámbito del partido"
Más acá en el tiempo las Ordenanza 8565/14 y 8567/14 sancionadas en la 16º Sesión Ordinaria del 20 de Noviembre de 2014, con el voto de Daffunchio, y Promulgadas por el Decreto Nº 3607/14, regulan la publicidad en la vía pública.
Ley de Transito 24449
ARTICULO 26. - PUBLICIDAD EN LA VIA PUBLICA. Salvo las señales del tránsito y obras de la estructura vial, todos los demás carteles, luces, obras y leyendas, sin excepciones, sólo podrán tener la siguiente ubicación respecto de la vía pública:
a) En zona rural, autopistas y semiautopistas deben estar fuera de la zona de seguridad, excepto los anuncios de trabajos en ella y la colocación del emblema del ente realizador del señalamiento;
b) En zona urbana, pueden estar sobre la acera y calzada. En este último caso, sólo por arriba de las señales del tránsito, obras viales y de iluminación. El permiso lo otorga previamente la autoridad local, teniendo especialmente en cuenta la seguridad del usuario;
c) En ningún caso se podrán utilizar como soporte los árboles, ni los elementos ya existentes de señalización, alumbrado, transmisión de energía y demás obras de arte de la vía.
Por las infracciones a este artículo y al anterior y gastos consecuentes, responden solidariamente, propietarios, publicistas y anunciantes.
Varela al Día
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