River está más cerca de la B Nacional que de Primera división

El domingo, en el Monumental, no tiene margen de error. Ya no habrá un partido más, ya no habrá un día después. Si no le gana al Pirata por dos goles o más, el futuro de uno de los dos clubes más grandes de Argentina estará en la B Nacional. Junto a humildes como Deportivo Merlo, Boca Unidos de Corrientes, Defensa y Justicia, Patronato de Paraná o Atlanta. De no creer.



River volvió de Córdoba al borde del descenso. River está más cerca de la B Nacional que de Primera división. Hasta el domingo a las 15.10, cuando arranque la revancha por la Promoción en el Monumental, en Núñez van a saber lo que es estar tres días en la B. Porque la derrota en Córdoba lo dejó al borde del descenso por primera vez en su historia. Todo un drama futbolístico. Después de muchas idas y vueltas, se confirmó que el partido se jugará con público, y se destinarán 2500 policías para el encuentro.



Belgrano dejó al Millo en jaque, penando con la posibilidad concreta de perder la categoría, y con la necesidad de ganar por dos goles en el desquite. Sea cual sea el resultado, pero por dos o más goles de diferencia. De lo contrario, su inmaculada historia quedará manchada por siempre.



River, uno de los tres equipos que nunca bajó a segunda división junto con Boca e Independiente, se autodestruyó en dos meses. Lleva ocho partidos sin ganar, donde apenas convirtió cuatro goles, y solamente consiguió un triunfo en los últimos once. La desconfianza, el nerviosismo, y la crisis en la que entró su conductor, Juan José López, hicieron estragos de un equipo que en la novena fecha del torneo Clausura estaba primero.



Hace un año, cuando comenzaba la temporada, ni en la peor pesadilla los hinchas hubiesen sufrido tanto como hoy. Y nadie imaginaba que River, realmente, podía irse al descenso. "No, papá, no se va. Mirá que van a perderse a River en el Fútbol para Todos, mirá que no van a ir los hinchas de visitante en la B Nacional.... No River no se va, es una locura", decían propios, y extraños. Pero esa frase se hizo pedazos, y el equipo de la banda roja en el pecho, con 33 títulos a nivel nacional, está a 90 minutos de una tragedia deportiva.



El domingo, en el Monumental, no tiene margen de error. Ya no habrá un partido más, ya no habrá un día después. Si no le gana al Pirata por dos goles o más, el futuro de uno de los dos clubes más grandes de Argentina estará en la B Nacional. Junto a humildes como Deportivo Merlo, Boca Unidos de Corrientes, Defensa y Justicia, Patronato de Paraná o Atlanta. De no creer.



A tres días del partido, el DT y su cuerpo técnico convocaron a 24 jugadores; incluso Ferrari, Román y Almeyda aparecen en lista aunque no jugarán, porque llegaron a la quinta amarilla. Lamela, por su parte, podrá seguir usando el artículo 225 por Ballón que se encuentra con su selección para jugar la Copa América.



Los concentrados para el partido ante Belgrano son: Juan Pablo Carrizo, Leandro Chichizola, Paulo Ferrari, Jonatan Maidana, Adalberto Román, Germán Pezzella, Juan Manuel Díaz, Alexis Ferrero, Leandro González Pirez, Maximiliano Coronel, Carlos Arano, Ezequiel Cirigliano, Matías Almeyda, Santiago Gallucci Otero, Walter Acevedo, Facundo Affranchino, Roberto Pereyra, Erik Lamela, Mauro Díaz, Leandro Caruso, Gabriel Funes Mori, Mariano Pavone, Fabián Bordagaray y Daniel Villalva.



A esta altura resulta una incógnita saber si Juan José López seguirá en el cargo o si Matías Almeyda, que probablemente se haye retirado en Córdoba, tomará la batuta. Muchos jugadores, y varios dirigentes, quieren que el Pelado se haga cargo. Y el escenario ayuda: llegó a las cinco amarillas y no podrá jugar la revancha. Y para agregar problemas, tampoco podrán estar Adalberto Román y Paulo Ferrari, que también están suspendidos.

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