jueves, 22 de septiembre de 2016

El estratégico TEG del peronismo bonaerense para 2017



Los 55 intendentes del PJ se dividen en cuatro grupos y buscan candidato para las elecciones. Massa, Cristina con Scioli o un peronista que salga de la galera para salvarlos a todos. Sin liderazgo y con pocas ideas nuevas, la batalla es por el territorio.

Ir a los brazos del peronismo transversal del impredecible Sergio Massa, ser oposición moderada de María Eugenia Vidal a la espera de que el PJ alumbre un candidato para 2017 o volver a amucharse detrás de un espacio que lleve a Daniel Scioli como senador con el aval de Cristina Kirchner.



Esas son las tres opciones que tienen hoy los 55 intendentes del Partido Justicialista en la provincia de Buenos Aires.

El TEG peronista bonaerense está en marcha. Lo que hoy predomina es la táctica del minuto a minuto con actos y fotos y lo que nadie ve claro es la estrategia.

Los jefes comunales se dividen por ahora en tres grupos distintos que tiene diferencias pero también similitudes y se delatan ansiosos por salir del rol de opositores que están de prestado en una provincia que durante un cuarto de siglo tuvo el sello del peronismo.


Intendentes del Grupo Esmeralda y Grupo Fénix, mezclados. ¿Salvese quién pueda?
Mientras buscan recuperarse de la ruptura del invicto que les provocó María Eugenia Vidal en 2015, los intentendes del PJ bonaerense se reunen, hablan todos con todos, se sacan fotos y festejan cada traspié de Mauricio Macri en busca de ser una alternativa ganadora en las elecciones legislativas de 2017.

El gran problema del peronismo bonaerense es que no tiene un dirigente capaz de convertirse en el líder que encabece una boleta ganadora en la tierra de Vidal.

Cristina Kirchner mide bien en algunas encuestas, pero los kirchneristas que quedan y los no kirchneristas coinciden en que no tiene interés en ser candidata. Para eso se ofrece Daniel Scioli, que ya se postula como candidato a senador pero que para muchos perdió toda posibilidad de conducir: como mucho puede acompañar.


Insaurralde, Zabaleta y Katopodis, los mosqueteros del peronismo moderado.
El Grupo Esmeralda fue el primer grupo que se armó pero no parece el más fuerte: se quedó con sus ocho integrantes y no pudo sumar a nadie más. Sin embargo, es el Grupo en el que sus integrantes tienen más claro lo que quieren.

Martín Insaurralde, de Lomas de Zamora, Gabriel Katopodis de San Martín, Juan Zabaleta de Hurlingham, Mariano Cascallares de Almirante Brown y Fernando Gray de Esteban Echeverría son el peronismo moderado que gobierna y convive con Vidal. Quieren dejar atrás al kirchnerismo pero saben que pueden ser los primeros en quedar a merced del massismo.


El Grupo Fénix de Nardini, Menéndez, Festa y Shujarchuk
El Grupo Fénix en cambio aparece como el que se muestra más cerca del kirchnerismo, aunque ahí conviven desde peronistas ortodoxos como Fernando Espinosa de La Matanza hasta otros más cercanos al gobierno que se fue como Walter Festa, de Moreno, Gustavo Menéndez de Merlo, Ariel Shujarchuck de Escobar y camporistas como Juan Ustarroz de Mercedes y Francisco Durañona de San Antonio de Areco.

Sin embargo, en el Grupo Fénix también son muchos los que hablan con Sergio Massa y se diferencian de lo que hizo el kirchnerismo y ven con resquemor la figura de Daniel Scioli como candidato. Justamente Massa y Scioli se perfilan hoy como los dos candidatos del peronismo, aunque el líder del Frente Renovador anuncia que irá con su espacio.


Pereyra y Descalzo, dos de los barones que sobrevivieron a la ola amarilla.
A los dos grupos más mediáticos, se suma ahora un tercero con ocho intendentes de la sexta sección electoral: el nombre suena conocido pero sus integrantes no: El Grupo de los Ocho. Son jefes comunales que gobiernan distritos de pocos habitantes y oscilan entre el proyecto Sergio Massa y el demorado lanzamiento de Florencio Randazzo. Néstor Álvarez de Guaminí, Alejandro Corvatta de Pigüé, Marcelo Santillán de Gonzales Chaves, Alfredo Fischer Laprida, Alejandro Acerbo de Daireaux, Roberto Álvarez deTres Lomas, Marcos Fernández de Monte Hermoso y Julio Marini de Benito Juárez.

A esos tres grupos se suma otro de los barones que sobrevivieron a todo: Alejandro Granados de Ezeiza -hoy filomacrista-, Mario Ishi de José C. Paz, Julio Pereyra de Florencio Varela -más cercano al Fénix- y Alberto Descalzo de Ituzaingó.

Verdaderos inoxidables de la política que gobernaron con Menem, Duhalde y los Kirchner, cuentan con una experiencia inigualable pero parecen tan confundidos como el resto de los intendentes que juegan hoy el TEG peronista de la provincia de Buenos Aires.

bigbangnes.com

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