Los casos de Triquinosis que afectaron al distrito de Florencio Varela, con epicentro en la zona rural de La Capilla, han generado un abanico sanitario de medidas. El secretario de Salud municipal, doctor Alejandro Bagato, se refirió sobre el particular en una entrevista concedida en las últimas horas a Varela al Día.
El médico dio detalles puntuales de como se ha desarrollado el cerco sanitario a partir de los primero afectados.
"Los casos de Triquinosis han puesto en relieve una situación de alarma de una enfermedad que se genera por una manipulación inescrupulosa de los alimentos. Con ello, la población corre riesgo y acá decimos que la responsabilidad es de todos. Y lo grafíco así: si hay un choque en una esquina porque alguien pasa el semáforo en rojo, la responsabilidad es de quien pasó el semáforo en rojo. Esto es lo que se planteó en la reunión de días pasados en La Capilla. La responsabilidad es de quien hizo los chacinados irregulares y sin los controles bromatológicos correspondientes. La responsabilidad es del dueño del local donde pone una carnicería en forma irregular y sin habilitar. Hay 5000 negocios en Florencio Varela…"
-El denominador común siempre se pregunta en estos casos adónde estaba el Estado en los controles.
-El supermercado se abrió como supermercado y fue controlado hace un año, en abril de 2011, cuando pasó bromatología haciendo el control para el supermercado. Si el señor tiene que ampliar su rubro debe pedir la ampliación. La norma dice que se debe pedir la habilitación y con ello poder funcionar. El señor no pidió ampliación, pone una carnicería y produce de manera irresponsable chacinados. Esto es lo que tenemos y nosotros venimos acompañando desde el IDEL (Instituto de Desarrollo Local) a muchos productores de la zona para que adquieran los conocimientos necesarios y así legitimar su situación de productor. Esto hay que balancear. Herramientas hay, no es que no hay acciones del estado y no se acompaña a los productores irregulares. Hoy estamos haciendo inspecciones a los productores para ver en qué estado de situación están y si vemos que ha manifiestas irregularidades se decomisará. Nosotros no tenemos potestad, con Bromatología que depende de salud, para decomisar. Este tema depende del Ministerio de Asuntos Agrarios, que es la autoridad competente. Nosotros, como lo ha pedido el intendente Julio Pereyra, vamos a denunciar todo ante las autoridades competentes para que intervengan. No podemos nosotros llevarnos los animales, eso lo hizo la autoridad competente en un operativo conjunto. Acá hubo productores inescrupulosos que fabricaron chacinados sin conservar ningunas de las reglas del arte. Si uno es carnicero debe saber que primero debe analizar la carne y luego hacer los chorizos o salamines. Después lo vende con el registro del producto. ¿Usted compraría un yogur con la fecha de vencimiento vencida? Por supuesto que no. Acá hubo un comerciante inescrupuloso que ha puesto a la población de Florencio Varela en riesgo. Tanto el dueño del local como el productor de los chacinados.
-Dicen en la zona que esa carnicería habría vendido unos 6 kilos de salamines a revendedores.
-Nosotros estamos haciendo la búsqueda epidemiológica de estos casos coincidentes con otros que ha habido en la Provincia de Buenos Aires. Estamos haciendo consultas con otros distritos que han tenido producciones de sus municipios, como Villa Gesell, Campana. La Triquinosis no es exclusiva de Florencio Varela, es un problema potencial en toda el área productiva de cerdos. Esto está claro. Por eso en Córdoba, La Pampa, Corrientes, Buenos Aires suelen haber casos con productores inescrupulosos que generan estas situaciones. Tenemos que seguir profundizando el trabajo con el IDEl para que todos nuestros productores estén en condiciones. Esto lo estamos haciendo desde hace más de un año, ustedes han publicado noticias del trabajo que se está haciendo, no es que ahora comenzamos cuando aparecieron casos de Triquinosis. En este camino estamos. Esta alarma sirve para acelerar los tiempos y para que los productores tomen conciencia, para que estén registrados por el SENASA y Asuntos Agrarios.
-El cerco o barrera sanitaria, ¿en que punto esta hoy?
-Se han hecho en las últimas horas operativos conjuntos. Una chanchería con 280 animales indicó medidas de Bromatología para cumplimentar al igual que un criadero de aves que se lo intimó ante la justicia por reiteradas violaciones a infracciones. Una carnicería de La Colorada no permitió el ingreso de los inspectores y hubo que acudir a la fuerza pública. Estos operativos van a seguir en el tiempo. Así lo ha indicado el intendente y ustedes saben la tarea que se está haciendo por una mejor salud para la población de Florencio Varela. Está es una fuerte política de Estado de Julio Pereyra.
-¿Qué cantidad de gente ha sido asistida?
-Unas 62 personas, con 7 internados dados de alta, unos 32 sintomáticos (con tratamientos) y 28 asintomáticos. Tuvimos una rápida intervención del Instituto Malbran y hay que decirlo: Tenemos en Varela un importante equipo de infectólogos con buenos contactos en el Instituto Malbran. Al otro día que se conocen los casos, el Malbran ya estaba trabajando al igual que el Muñiz, con altos conocimientos en estas patologías. Hemos estado en contacto con los referentes nacionales. También estamos trabajando con otros municipios que tienen estos problemas. Estas políticas son partes de la gestión. El hecho de que esto haya sucedido pone en evidencia que los productores deben respetar las normas. Y a los consumidores nos muestra un alerta: cuando vemos un salamín que no tiene el papelito de origen, no es mejor. El papelito nos da la garantía de saber a quién tenemos que reclamarle si nos pasa algo. La garantía es esa. No es mejor porque no tenga el papelito. Esto es algo cultural, que tenemos que rever. Siempre dijimos que rico el chorizo hecho en el campo, porque la gente de campo hace estas facturas y porque nosotros, muchos, vamos al campo y traernos estos alimentos. Siempre dijimos que hay que tomar el agua del campo por es sana y después descubrimos que el agua de campo tiene arsénico. Estas conductas tenemos que ir cambiando y son conductas culturales. Varela al Día
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