Una situación muy extraña vivió Silvia Santagatti mientras esperaba a su marido en la Estación de Bombeo en el yacimiento Puesto Hernández, cuando observó una luz intensa que en principio estaba estática, lo que le facilitó fotografiar antes de que desapareciera en el cielo.
No es la primera vez que Santagatti experimenta una situación similar a la del viernes. “Hace siete años, en Florencio Varela, provincia de Buenos Aires, el cielo estaba cubierto de nubes y por encima observé una luz circular que se movía”. Y agregó: “Con mi marido nos movíamos y la luz se movía encima de nosotros”.
Si bien el fenómeno duró alrededor de 8 minutos, según quedó registrado en el reloj de la cámara con la que fotografió el fenómeno, la mujer asegura que todo sucedió en cuestión de segundos, lo que agrega más misterio a la historia.
En diálogo con LM Neuquén, Santagatti comentó que el hecho sucedió el viernes alrededor de las 19.15, en pleno atardecer con la caída del sol en la zona de bombeo en el mencionado yacimiento.
Indicó que su marido y su hijo se bajaron e ingresaron a la base petrolera y ella quedó sola en la camioneta.
Dijo que en un momento le llamó la atención “una potente y resplandeciente luz, de color naranja fuerte y fucsia, que estaba a mi derecha, casi al ras del piso, estática, como flotando en el aire, y no hacía ruido”. En ese momento, según su relato, “bajé el vidrio y saqué una foto, me bajé de la camioneta y pude tomar un par de fotos más antes de que comenzara a moverse para perderse en el cielo”.
Precisó que en un principio la luz estaba a unos 2 metros de donde se encontraba. “Sentí una mezcla de miedo y asombro, pero, inconsciente, me bajé de la camioneta exponiéndome a que me pudiera pasar algo, pero igual lo hice”.
La mujer continuó: “La luz después se movió hacia arriba de un árbol y me dio tiempo para tomar tres o cuatro fotografías más hasta que la luz se alejó, sin hacer ruido, para el Oeste y se perdió en la cordillera”.
Al momento de bajar las fotos a la computadora, su marido se dio cuenta que hay 8 minutos de diferencia entre la primera y la última fotografía que pudo tomar.
Al hacer zoom en las imágenes pudieron observar “un triángulo arriba de los árboles y algunas siluetas en las ramas”.
Precisó que “cuando la luz se alejó la pantalla del celular se puso de color naranja y se apagó como si hubiera sufrido un exceso de energía”.
lmneuquen.com.ar
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