Gabriel Guerra desde San Eduardo a Boca Jr

El que habla con Olé es Gabriel Guerra, figura de la Quinta puntera e invicta, que el sábado empató 1-1 frente a River. Delantero de peso de la categoría 93, su sociedad con Franco Fragapane (ya subió a la Reserva) da que hablar en el ambiente del fútbol amateur. “Desde Pre-novena que estamos jugando juntos. Ya nos conocemos prácticamente de memoria. El va más por afuera y yo por adentro”, relata el pibe que arrancó jugando en el club San Eduardo, de Florencio Varela, y que llegó a Boca en Infantiles.


Gabriel Guerra, figura de la 5ª, se define como “un 9 al que le gusta tirarse atrás”. ¿Te suena?


-¿Qué clase de jugador sos?



-Soy un jugador al que le gusta tirarse atrás y hacer goles. Uso la 9, pero no soy 9 de área, me gusta entrar jugando...



-¿Y a qué delanteros mirás habitualmente?



-Lo que pasa es que a mí me gusta jugar más de enganche, me gusta estar en contacto con la pelota. Sé que tengo que perfeccionar mucho el cabezazo.



El que habla con Olé es Gabriel Guerra, figura de la Quinta puntera e invicta, que el sábado empató 1-1 frente a River. Delantero de peso de la categoría 93, su sociedad con Franco Fragapane (ya subió a la Reserva) da que hablar en el ambiente del fútbol amateur. “Desde Pre-novena que estamos jugando juntos. Ya nos conocemos prácticamente de memoria. El va más por afuera y yo por adentro”, relata el pibe que arrancó jugando en el club San Eduardo, de Florencio Varela, y que llegó a Boca en Infantiles. A partir de ahí, construyó una carrera firme en Inferiores. Entre Séptima y Sexta, ya convirtió 41 goles y este año, en Quinta, lleva seis. Sin embargo, su fuerte parece otro. “Yo no soy del tipo de delantero que se queda en el área esperando solamente que llegue algún centro, mi fuerte es participar del juego”.



-¿Te gusta el estilo de juego de Viatri?



-Sí, se tira a jugar, y algo parecido, en cuanto a características, tengo. El técnico me pone en una posición parecida a la de él.



-¿En quién te reflejás?



-Mi ídolo es Román, siempre trato de mirarlo, lo sigo. Es increíble cómo le pega a la pelota, cómo maneja los tiempos, cómo conduce al equipo. Muchos dicen que me parezco en algunas cosas, je. Pero la verdad es que a mí me da vergüenza.



-¿Lo conocés?



-Todavía no tuve la suerte. Cuando está en el hall de Casa Amarilla, a veces te saluda. Ojalá algún día pueda compartir aunque sea un minuto en la cancha con él.



-¿Estás muy ansioso por subir a Primera?



-Trato de estar tranquilo, de trabajar, de no romperme la cabeza con que tengo que subir ya. Hablo mucho de esto con mi viejo. Estoy ansioso como todo jugador que está cerca, pero también estoy tranquilo, no me quiero apurar.