miércoles, 25 de marzo de 2015

EL DESARROLLO ENDOGENO Y EL ESTADO MUNICIPAL DE FLORENCIO VARELA

Para hacer comprensible el concepto para ellector,  hay que verlo como cuando  se planta una semilla y nace un brote que crece y se desarrolla. A la vez sus ramas se diversifican y dan flores, frutos o sombra,  de ellas se extrae madera para todo tipo de artesanías y construcciones, papel para uso de todo tipo (publicaciones de diarios, revistas, cuadernos, carbón de leña,  etc. etc). El árbol en éste simple ejemplo es la materia prima que genera industrias y estas a su vez fuentes laborales productivas.
 Estas empresas en un Municipio con buenas políticas públicas responden al concepto delDesarrollo Endógeno (hacia adentro) que hace al crecimiento del mismo y que, a la vez permite la exportación de sus producciones, generando un circuito productivo y de generación de empleo interminable, donde se fortalece la industria, la familia (base de la economía productiva), el negocio del barrio y el de todo el distrito, que como la planta,  brotan, según las condiciones que el estado Municipal les brinde, crecen, se desarrollan y dan trabajo.
Florencio Varela, como Estado Municipal, con un intendente que no tiene políticas locales de crecimiento, desde hace  más de veinte años, no promueve este desarrollo endógeno,  por tanto no hay producción ni generación de empleo local. Nuestra gente sigue viajando varias horas para desempeñar tareas en otra parte y la mayoría de los jóvenes y no tanto están sin trabajo, sostenidos con planes sociales de todo tipo, otros tanto no cuentan con apoyo estatal alguno, directamente están abandonados a su suerte. Ni hablar del sistema de salud y otros muchos servicios como gas natural, teléfonos, luz eléctrica, pavimentos, infraestructura urbana, cloacas y agua corriente.
En reuniones con vecinos, en más de cincuenta barrios recorridos a la fecha,  todos los planteo son casi calcados, muestran la ausencia del Estado Municipal, el abandono de las políticas locales, la desidia con que actúan los funcionarios y el desconocimiento que tienen del distrito, donde muchos de ellos no están radicados, ni vivieron nunca, y así encuentro casos donde a mi entender,el Estado Municipal (comprendido por su Intendente y sus allegados en el Concejo Deliberante) son partícipes necesarios del decaimiento Institucional, de la falta de compromiso con el ciudadano común, el que no tiene voz, el que ve como su calidad de vida se deteriora día a día, el que siente que sus hijos crecen en medio de la delincuencia que se va adueñando de las calles, de los barrios, con la droga , el robo automotor, los asaltos a mano armada, el que no sabe cómo actuar, el que no es oído (no escuchado), el que sale a trabajar y no sabe que le puede pasar en la puerta de su casa.Esa es la realidad del Florencio Varela hoy, no la que se pinta en los discursos oficialistas.
Como prueba de lo antes dicho, mencionaré un lugar abandonado por el Municipio y su Intendente, donde la inseguridad y el decaimiento de la calidad de la vida humana es permanente: Barrio EL MOLINO calle  52B, pegada al arroyo Las Piedras, al ingresar a la misma se comienzan a ver los coches robados, quemados y apilados que sobre el final cortan la circulación vehicular y ya estánsemi-tapados por el pasto (hay más de veinte) sin contar otros tantos tirados en el cauce del arroyo que con una crecida grande, pueden quedar obstaculizando el paso de agua y generar un desastre mayor; a ello se agrega falta de patrullajes policiales, no ingreso de remis por temor, falta de llegada del micro 500, robo e incendio de vehículos en la puerta de los vecinos; venta de drogas; falta de iluminación, falta de mantenimiento de la calle, basurales a cielo abierto y contaminación de las aguas donde desde el lado de Solano los vecinos tiran la materia fecal de sus baños al cauce del arroyo.A ello sumemos falta de atención de la salud primaria, en la Salita de Barrio San Nicolás donde no se brinda el servicio necesario, obligando a la gente del lugar a cruzar por puentes de hierro precarios situados sobre el arroyo, a San Francisco Solano (Quilmes) y de allí tomar micros que los lleven a algún hospital, dado que en los Eucaliptos la salita Quilmeña está saturada.
En Florencio Varela, el Ejecutivo Municipal y sus funcionarios desconocen lo que es  crecimiento endógeno productivo, aunque generan el crecimiento endógeno de la delincuencia, la venta de drogas y el robo automotor, es decir de la  inseguridad que afecta la calidad de vida de todos los vecinos y repito, son co-rresponsables todos los Concejales oficialistas y allegados que no hacen honor a la representación popular que les confirió la ciudadanía para que la defiendan, hagan respetar sus derechos y mejoren su calidad de vida. Parece queal asumir sus cargos entendieron todo lo contrario, que su trabajo era hacer de aplaudidores, levanta manos y utilizadores de la herramienta política para beneficio propio, buscando el voto solo para perpetuarse en sus cargos o en el poder.
Las fotografías que ilustran esta nota son más que elocuentes de lo que sucede en una parte del Barrio El Molino, denominada zona roja porque catastralmente no existe, al estar asentados sus pobladores sobre lo que era la Tosquera de San Nicolás, aunque no por eso deben quedar en el olvido.
Sr. Intendente Municipal Dn. Julio  César Pereyra, oiga por una vez o lea bien esta nota y haga algo por estos vecinos olvidados, demuestre que el Estado Municipal existe, saquen los coches robados de la zona y del cauce del arroyo, para ello tienen una Ordenanza, no necesitan grandes ideas, ya están elaboradas, ponga sus funcionarios a trabajar, a caminar la calle, no a permanecer detrás de un escritorio.

                                                                      Licenciado Jorge A. De Gioia

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