Viven en Túnel de la Estación

Es una joven pareja con un bebé de 18 meses, hace 15 días que está en la calle. El municipio la visitó tres veces y no logró una solución. Hasta se les prometió ir a vivir a un terreno usurpado del barrio Pico de Oro. Dia y noche están en el paso peatonal subterráneo de la estación de trenes. La Policía Federal se los puede llevar detenidos de un momento a otro.






Diego Madalena y Lorena López, padres de un bebé de 18 meses. 24 y 21 años. El, ex chico de la calle; ella, se fue de la casa por problemas con su familia. Viven, si es que se puede llamar vivir, en el túnel de la Estación Florencio Varela y desde hace 15 días. No han encontrado otra salida, pues las puertas que golpearon se abrieron, para escucharlos y todo ha quedado en promesas. La última fue ayer a la mañana cuando se conoció la carta que hemos publicado. Al túnel llego Defensa Civil municipal, que pidió horas para ubicarlos en algún lugar. El caso fue trasladado a Manuel Pasalaqua, subsecretario de Salud, pero todo quedó ahi. Anoche la pareja esperaba que alguien la ayudara.

Como bien dijo en nuestra edición de ayer el lector José Luis Galeano, con su carta en la que sacó a la luz el caso, el olor a orín que se percibe en el túnel de la Estación Florencio Varela, no se aplaca ni con el más fuerte de los perfumes.

Parece mentira que en el país del que tanto se habla de inclusión social, haya gente viviendo en la calle y no solo en Varela sino frente mismo a la Casa Rosada. Es más: en la puerta de la propia AFIP. Sería interesante que algún día los políticos y funcionarios dejaran los helicópteros, los autos importados con vidrios polarizados y bajaran al llano para ver de qué se trata eso que se llama pobreza.



en la via

Diego lleva el relato de lo que ha vivido en estos 15 dias junto a su mujer y su pequeño bebé de nombre Pablo.

"A mi me han echado de mi casa de Solano. Tuve problemas serios. Pasé mucho tiempo en la calle. Yo fui un pibe de la calle, Don, hasta que hace 4 años la conocí a Lorena y armamos la pareja”, dice Diego.

"A mi no me echaron de mi casa, en Bosques, yo me fui con Diego porque había muchos problemas", dice la joven.

De acuerdo al relato de Diego, la pareja tuvo la oposición cerrada de la familia de ella. "Yo la iba a ver a ella, le llevaba ropita para el nene. Así fue el tema. Encima estoy sin trabajo, no tengo documentos, la partida de nacimiento no aparece. No tengo plan y no tengo nada. Lo puesto"

"Yo cobro la asignación universal por hijo"-aclara Lorena .

La gente va y viene por el túnel. Diego extiende su mano y recibe la caridad. La pareja no tiene muchos efectos personales, solo un viejo colchón y dos paquetes con ropa.

"Con esta plata que juntamos compramos pañales para el nene. Acá cerquita, en Cáritas, nos bañamos y comemos algo”, dice Diego y agrega: "Yo la he pasado fea en la calle. Antes que estuviera con ella paraba acá en Varela. Por eso ella comenzó a tener problemas con la madrastra. Esta mujer no quería que yo viera al nene. Lorena se cansó de eso y vinimos a parar acá”

Pablito llora. No se sabe si es de hambre o porque está mojado. Lorena intenta calmarlo con su pecho. El olor a orín penetra en las fosas nasales.

"Esta mojado, por eso llora. Es terrible estar acá pero no tenemos otra cosa, señor. Salimos de acá la semana pasada, fuimos a hablar con la gente de Desarrollo Social para ver si conseguíamos una solución. Nos dijeron que a ella la podían mandar a una casa que no conoce y para mi me iban a dejar acá. A ella eso no la convencía, porque íbamos a estar separados de vuelta. Después vino la gente del municipio, nos tomaron los datos, nos preguntaron qué hacíamos acá y nos dijeron que aguantemos acá. Se fueron y volvieron a los tres días justo cuando habíamos ido a Desarrollo Social. Vino al otro día un asistente social. Nos dijo que iba a buscar un lugar en Pico de Oro donde estaban tomando terrenos. Iba a hablar con los vecinos para ver si nos dejaban instalar. Pero no pasó nada, hasta que hoy vino la gente de Defensa Civil y creo que por la carta que sacaron en el diario. También nos dijeron que aguantemos acá"

-¿A usted le dijo una asistente social que lo iba a llevar adonde estaban tomando tierras?

-Si, eso dijo la Asistente Social.

-Pero usted no tiene nada, ni para armar una casilla.

-Nada de nada. Lo que tenemos acá es regalado, como el colchón, la frazada. Gracias a la gente que es solidaria. Hay gente que nos da el desayuno, hay gente que nos trajo ropa, hay gente que nos da plata para que comamos algo. Y gracias a Cáritas. Pero día y noche estamos acá, con el riesgo de que le pase algo a la criatura.

-¿Ha pasado momentos difíciles?

-Si, ayer se estaban peleando allá arriba (en el anden) y se vinieron para acá abajo. Después apareció uno que había tomado mal, se ve que había jalado (pegamento) y comenzó a decirnos que nos iba a conseguir un lugar pero con la condición que le entreguemos el nene. Quería llevarse el nene a toda costa. Gracias a Dios lo echamos cuando comenzamos a los gritos. Pero acá no se puede estar. Hay de todo.

-¿Droga?

-Venga a ver a la tarde como los pibitos se matan con la bolsita. Esos pibitos son peligrosos. Yo sé lo que le digo, porque estuve en la calle.

Varela al Día