Quilmes retornó esta mañana a los entrenamientos, luego de la derrota ante Desamparados de San Juan. El clima en la primera práctica de la semana estaba relacionado con el último resultado sufrido en el Centenario.
La actividad pasó por una tarea diferenciada para los que jugaron y los que no lo hicieron desde el minuto inicial. Los titulares hicieron un trabajo aeróbico de pasadas de 400 metros, mientras que el resto del plantel realizó un ejercicio técnico de fútbol en espacios reducidos, en la cancha auxilar.
No se entrenaron a la par de sus compañeros Pablo Garnier (distensión en el aductor derecho) que quedó afuera del próximo partido ante Defensa, Sebastián Martínez (fatiga muscular) y el uruguayo Ernesto Goñi se resintió de la lesión que arrastraba en su rodilla izquierda.
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