El concejal electo Dardo Ottonello envió una carta a Varela al Día analizando la visita del secretario Vanrell al Concejo Deliberante
El Ejecutivo municipal de Florencio Varela insiste en que su Proyecto de Planta de Tratamiento de Residuos, que fuera aprobado por el Concejo Deliberante –con el voto de la mayoría oficialista- el pasado 18 de setiembre, no prevé la incineración, ni el tratamiento de deshechos tóxicos, ni de ningún tipo de residuos que no sean sólidos domiciliarios; y que tampoco contempla el ingreso a nuestro distrito de residuos provenientes de otras comunas (con la excepción de Berazategui).
Así lo han ratificado y asegurado el Secretario de Obras y Servicios Públicos y la Secretaria de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Municipalidad, en una reciente reunión con los Concejales que componen los diferentes bloques políticos.
Si esto fuera cierto y expresara la verdadera intención del Intendente municipal y de sus funcionarios y, por lo tanto, si la Planta de Tratamiento de Residuos que se proyecta construir tuviera como única finalidad “la recepción, la separación, el compostaje, etc. de residuos sólidos domiciliarios exclusivamente” que provengan “solamente de Florencio Varela y Berazategui”, la cuestión sería muy, pero muy distinta a la que establecen las ordenanzas sancionadas, y algunas de nuestras lógicas y fundadas preocupaciones tal vez no tendrían razón de ser.
Pero, lamentablemente para nuestra comunidad, la Ordenanza que autoriza al Intendente a constituir la Sociedad Anónima con participación estatal mayoritaria dice textualmente en su “Artículo 3º: El objeto de la sociedad consistirá en: …”Realizar la recolección y/o transporte de residuos en general, ya sea de residuos sólidos urbanos, residuos hospitalarios, residuos industriales, residuos peligrosos, tóxicos y/o contaminantes, sean sólidos, líquidos y/o gaseosos” …”Transporte, operación, tratamiento, depuración e incineración y efluentes líquidos, semisólidos y/o sólidos domiciliarios, industriales, comerciales, patológicos, peligrosos o cloacales; reciclaje y recuperación de solventes” (el subrayado es nuestro).
Resulta evidente para cualquier vecino, con la simple lectura y sin necesidad de ser un experto en la materia, que entre lo dicho y lo escrito, entre las manifestaciones o explicaciones de los funcionarios y lo que está sancionado y establecido en la Ordenanza, hay enormes, notables y peligrosas diferencias.
Y más allá de los discursos y de las intenciones lo que vale es lo que establece la norma legal. Es el texto de la Ordenanza lo que determina –para bien o para mal- los verdaderos alcances y los reales objetivos que tendrá la Planta de Residuos que se construirá en Fcio. Varela.
Es por eso que, si es verdad lo que dicen los Secretarios del gobierno municipal -y confío en que así sea- les propongo al señor Intendente Municipal y al conjunto de los integrantes del Concejo Deliberante que, en aras de la tranquilidad y del bienestar de los varelenses, y por la transparencia de los actos de gobierno, procedan -cada cual en su ámbito de competencia y de sus facultades- a dejar sin efecto o, cuando menos, a modificar sustancialmente el contenido de dicha Ordenanza.
Pueden hacerlo, el Intendente Municipal mediante el ejercicio de su facultad de vetar total o parcialmente la ordenanza sancionada, y los Concejales presentando y votando una nueva ordenanza derogatoria o modificatoria de una norma legal que contradice la intención y los objetivos declarados públicamente por sus propios autores.
DARDO OTTONELLO
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