miércoles, 16 de febrero de 2011

CONTINÚAN LOS PAROS DE LOS PROFESIONALES DE LA SALUD.

PARAN 48 HS. JUEVES 17 Y VIERNES 18
Los Profesionales de la Salud del municipio (CICOP) continuamos en medidas de fuerza debido a la falta de respuestas de la Secretaría de Salud y Desarrollo Social y del Gobierno Municipal a los múltiples problemas planteados y que aún no han sido abordados en su verdadera complejidad por los responsables.


En nota anterior hacíamos mención a las diversas cuestiones que motivan la situación que venimos padeciendo, haciendo hincapié en la demora en resolver de manera definitiva las condiciones precarias de vinculación laboral de agentes que trabajan desde hace varios años en el distrito, incluyendo una situación de discriminación a un grupo de profesionales (abogadas) que cumplen todos los requisitos para su ingreso, pero que los funcionarios se niegan a ejecutar.

También en publicación precedente, comentábamos acerca de varias situaciones de violencia que se vienen produciendo en distintos ámbitos donde desempeñan tareas nuestros afiliados, fundamentalmente en los Centros de Salud, que han venido a conformar parte sustancial de nuestro reclamo actual, vista la trascendencia que reviste tal instancia.

Algunos ejemplos van a servir para ilustrar mejor el panorama que estamos describiendo:

- En pliego de demandas consta retiro de pedido de sanción a Viviana Verón, compañera que no sólo padeció maltrato y discriminación de parte de su superior (Director de Derechos Humanos), sino que luego tuvo que padecer solicitud de sanción que mereció intervención de nuestro plantel de abogados y reconocimiento de parte de la Secretaría de Gobierno de la pertinencia de nuestro planteo.

- En el barrio La Cava de Don José, el Equipo de Salud padeció de parte de una persona amenazas e intimidaciones que ameritaron denuncia en la Fiscalía correspondiente.

- En el Centro de Salud Malvinas, una enfermera fue brutalmente agredida por una pareja de “pacientes” de un barrio lindero, que también insultó y maltrató al resto del personal presente, así como a las personas que se hallaban a la espera de ser atendidos.

- En Ingeniero Allan, una médica y una enfermera de guardia padecieron insultos de parte de la familia de un niño que ingresó fallecido a la Sala.

- En Villa Argentina, la semana pasada parte del personal padeció un asalto a mano armada, sufriendo el robo de sus pertenencias y de insumos del Centro.

- En otros Centros, profesionales han sufrido presiones a fines de dar respuestas a consultas que no son pertinentes a las incumbencias ni a las formas adecuadas, así como en otros se le da amplia injerencia a personas externas al Equipo, que maneja recursos que no posee ni el mismo personal.



Como decíamos, éstas son sólo algunas de las cuestiones que suceden; podríamos completar páginas enteras con relatos similares. Como se observa, el cúmulo de situaciones presenta diverso origen; existe violencia inherente a nuestra sociedad, circunstancias relacionadas con dificultades en la atención, problemas de instancias graves que requieren de comprensión y acompañamiento y manejos discrecionales de determinados estamentos del poder que no favorecen un adecuado desarrollo de la atención de salud, sino lo opuesto.

Sin embargo, hay una situación que se repite de manera sistemática: la ausencia o, eventualmente, la inadecuada respuesta de parte de los funcionarios del área que, en algunas oportunidades, hasta roza lo insólito. No solicitamos represión, presencia de fuerzas de seguridad ni medidas de ese tenor. Sí reclamamos fuertemente de las autoridades presencia, contención, estar a nuestro lado, no culpabilizar a quienes son víctimas, escucharnos. Les pedimos que estén a la altura de las circunstancias que su investidura reclama; deseamos que esto sea posible.

Finalmente, una necesaria aclaración: diálogo significa un encuentro entre representaciones que se respetan, se interpretan, negocian…lo demás es sumisión al poder. Cada cual hace lo que le parece; no somos quiénes para cuestionarlo, pero está claro que no es nuestro estilo.



ASOCIACIÓN DE PROFESIONALES DE LA SALUD DE F. VARELA

(CICOP)

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