lunes, 23 de agosto de 2010

EL CENTRO DE JUBILADOS MEDALLA MILAGROSA SE PREPARA PARA CELEBRAR SUS PRIMEROS VEINTE AÑOS DE INTENSA ACTIVIDAD

El Centro de Jubilados “La Medalla Milagrosa” del barrio Villa Angélica cumplirá el próximo 3 de diciembre, 20 años de trabajo a favor de la comunidad, y lo celebrará con un festejo que se llevará a cabo, dos días después, el domingo 5.

Así lo contó el impulsor y presidente de la institución, José Luis Celada, durante el almuerzo mensual de agosto, que tuvo una importante concurrencia de vecinos asociados, que, en un importante número, llegaron acompañados por miembros de sus familias y amigos.

“Ese día (el primer domingo de diciembre), pensamos hacer una gran comida”, adelantó Celada, un jubilado de comercio que, en 1990, vendió su automóvil, un Fiat 147, para lograr comprar el terreno que hoy ocupa la sede social, en avenida Senzabello 1150.

En el interior de la misma, a diario, se desarrollan variadas actividades dirigidas a todas las edades, pero en especial a los abuelos que llegan de diferentes barrios.

“Tenemos 700 socios”, cuenta Celada acerca de los vecinos que se suman a las distas propuestas que posee el Centro y que incluyen aportes para el comedor de la parroquia Medalla Milagrosa.

“Nos costó, pero le pusimos el pecho a los problemas..., pero esos, eran otros tiempos”. “Con la unión y el aporte de todos, hicimos esto”, recuerda Celada al referirse a los inicios y desarrollo de la entidad, en sus primeros años.

Después, añade orgulloso: “Decí que no tenemos más lugar, sino ¡Mamita querida!, hasta pileta climatizada, habría”. “Tenemos esa idea”.

En el encuentro, estuvo el intendente Julio Pereyra que saludó a los abuelos, atendió diversas inquietudes vecinales y contó de las diversas mejoras que llegan al distrito, como la creación de la Universidad “Arturo Jauretche” de Florencio Varela; las extensiones de redes de agua potable y cloacas; las obras de pavimentación; y la modernización y ampliación del polideportivo municipal “La Patriada” –“será el mejor de la zona sur”, dijo Pereyra-.

Tras el almuerzo y las palabras, se inició el baile en el salón. “Si no estuviéramos nosotros, todos los que están acá, estarían aburridos en casa”, hace ver Celada.

“Qué vamos a ser pasivos”

Por todo lo que se hace en el lugar, Celada asegura: “no me alcanza el tiempo, hermano. Acá, abrimos de 8 a 18 horas y tenemos muchas actividades y servicios: Vamos a Pami, hacemos gestiones por abuelos que tienen problemas económicos o de salud; y conseguimos viajes que son baratos y atendidos perfectamente bien. Y si hay un problema, el primero que reclama, soy yo”. “Pero siempre sale todo bien”.

En la sede, también atiende una enfermera, una pedicura y hay clases de Yoga. “Todo gratis para los socios y los afiliados al Pami, del cual, los jubilados, somos la mano derecha”, dice el Presidente que, por muchos años se desempeñó como jefe de una empresa de cerámicas de Wilde.

“Qué vamos a ser pasivos”, resalta Celada, para luego contar que “el otro día”, colocó una membrana en un techo; y que el próximo 19 de septiembre saldrá, en un contingente con otras 35 personas, en un viaje organizado por la entidad, hacia Cataratas del Iguazú, en las provincia de Misiones -“una de las 10 maravillas del mundo”-, asegura-.

“Este Centro se conoce todo el país, con viajes baratos y buenos”, insiste. “Al de Cataratas, nos prendimos varios porque es barato, y la gente del interior nos espera, porque con el Turismo nuestro, ellos comen”.

José Luis Celada, presidente de “La Medalla Milagrosa”, cumplirá el próximo 31 de diciembre 80 años de una “una intensa vida de trabajo”, según él mismo define.

Nació en Resistencia, provincia de Chaco y desde allí, en 1949, se radicó en Florencio Varela. Lo ocuparon varios negocios y tareas.

En su labor por el crecimiento del centro, es apoyado por su esposa Celia –“siempre acompaña”-. Y destaca que en los últimos 20 años, “Florencio Varela mejoró un montón en todos los aspectos; bajo ningún punto de vista nos quedamos en el tiempo; en comparación a otros lugares, estamos bien”.

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