martes, 13 de abril de 2010

Obispo decide donde descansará Santolín

Sin la presencia de autoridades, representantes de las fuerzas de seguridad y de los colegios de Florencio Varela, fueron inhumados ayer los restos del cura que hizo la obras más grande de San Juan Bautista. Juan Santolín descansa en la bóveda de la familia Sellas, del cementerio varelense. Hoy el Obispo Luis Stöckler recibiría a su Canciller, Armando Dessy, y al Padre Marcelo de San Juan Bautista quienes pedirán el traslado del cuerpo a la Iglesia. El Derecho Canónico no permitiría el hecho. El titular de la diócesis decide. No se descarta juntar firmar con un petitorio.
Con un marco poblado de vecinos y feligreses de San Juan Bautista, ayer fueron despedidos los restos de Monseñor Juan Santolín en medio de interrogantes varios en cuanto a la presencia de autoridades.

La Misa de Responso de Cuerpo Presente se celebró en la parroquia que lo tuvo a Santolín por más de 45 años al frente. Al tiempo que esta se celebraba, afuera todo se desarrollaba con absoluta normalidad. Los colegios cercanos a San Juan Bautista dieron clases. No hubo duelo. Los piqueteros del boulevar cortaron como todos los mediodías la avenida San Martín, desviando el tránsito por la puerta de San Juan Bautista, a donde llegaba gente mayor que debía cruzar entre camiones y colectivos. La única guardia de honor que tuvo el Padre Juan fue la de los Bomberos Voluntarios de Florencio Varela y la Defensa Civil municipal. No hubo abanderados de los colegios, los comisarios de la seccionales y de la Distrital fueron indiferentes. Del mismo modo se notó la ausencia de funcionarios municipales y los diputados nacionales. Ese era el momento de la despedida de un hombre que con aciertos y errores permaneció 47 años al frente de la iglesia madre, de todas, de Florencio Varela. Era la despedida del hombre que bregó para que nuestra Ciudad volviera a llamarse San Juan Bautistas y por ley de la Provincia se hizo realidad.

Se iba Santolín y hasta algunos curas faltaron. No estaban todos.

Los restos del Padre Juan fueron alojados en la bóveda de la familia Sellas en el cementerio local. Alli estarán hasta que algún día puedan descansar en San Juan Bautista. Sin embargo, el Obispo Luis Stöckler habría de aplicar el Derecho Canónico por el cual solo aquellos que han fundado una parroquia tienen derecho a ser sepultados en ellas.



biografia por

el padre Dessy

El Padre Juan Santolín nació en Creazzo, Vicenza (Italia) el 28 de noviembre de 1921. Miembro de una familia de diez hermanos llegó con sus padres a Argentina a los cinco años de edad, radicándose en Quilmes, donde cursó sus estudios primarios. Su Parroquia de la infancia fue la Inmaculada Concepción [hoy Catedral] de dicha ciudad: allí tomó su Primera Comunión, fue monaguillo y miembros de la Acción Católica.

Con 13 años de edad ingresó al Seminario de la Arquidiócesis de La Plata, donde realizó sus estudios de humanidades, filosofía y teología.

Fue ordenado sacerdote el 21 de diciembre de 1946, a los 25 años de edad, pasando a desempeñarse sucesivamente, como Vicario Cooperador, en las Parroquias de Magdalena, Lomas de Zamora y Catedral de La Plata. Fue Capellán de los Colegios San Ignacio de Wilde y de la Misericordia, en La Plata.

Designado Párroco de San Juan Bautista de Florencio Varela por el Arzobispo de La Plata, Monseñor Antonio José Plaza, asumió sus funciones el 8 de octubre de 1961, pasando a atender a la principal de las dos parroquias del Varela de entonces.

Su trabajo ha sido muy amplio en los distintos barrios de la jurisdicción parroquial con la construcción de capillas que con el tiempo llegarían a ser parroquias. Entre ellas cabe mencionar a "Nuestra Señora de Luján", de Zeballos, "San Cayetano" del Km. 26, "San José Obrero" del Barrio La Sirena, "San Pedro Apóstol" del Barrio San Eduardo y "San Pantaleón" en el Barrio Lomas de Monteverde. Atendió pastoralmente a la Capilla ya existente [hoy Parroquia] "Medalla Milagrosa" del Barrio Monteverde

Desde los comienzos de su actuación en Varela encaró decididamente la creación de Centros Educacionales: ya en marzo de 1962 comenzó el Colegio Primario San Juan Bautista; en marzo de 1966 abrió sus puertas la Escuela Industrial y en el año 1970 el Jardín de Infantes, ambos del mismo nombre. En los tres casos se esforzó por dotar, con al ayuda de la comunidad, de adecuadas construcciones a dichos establecimientos educativos.

Las instalaciones escolares anexas al templo parroquial brindan, además, el servicio de sus salones para las tareas de catequesis, funcionamiento de las diversas instituciones parroquiales, las clases del Instituto Diocesano de Catequesis y las reuniones de diversos grupos de utilidad social, como los alcohólicos anónimos y ALCO.

Digna de mención es la obra de ampliación y refacción del templo parroquial y sus instalaciones, la que ha brindado a Florencio Varela de un magnífico templo para la celebración del culto y de los sacramentos.

Más recientemente el Padre Juan encaró la construcción, en predio separado del templo parroquial, de la Casa para Cáritas Parroquial, edificio que alberga también los servicios de Talleres para Jóvenes con Capacidades Diferentes, la Santería y la Radio Vida Satelital del Obispado de Quilmes.

Por su larga y meritoria actuación al frente de la Parroquia el 11 de agosto de 1999 fue designado por la Santa Sede "Prelado de Honor" de Su Santidad el Papa Juan Pablo II.

Gracias a sus gestiones se obtuvo, hace pocos años, la Ley Provincial que designó con el nombre de "San Juan Bautista" a la ciudad cabecera del Partido de Florencio Varela.

Miembro, en varias oportunidades, del Consejo Presbiteral y del Colegio de Consultores de la Diócesis de Quilmes, gozó siempre del aprecio y la amistad de primer Obispo de Quilmes, Mons. Jorge Novak, de su sucesor, el Padre Obispo Luis Stöckler y de sus colegas los demás presbíteros quilmeños.

El 11 de mayo de 2008, día de asunción del Padre Gino Gardenal como su sucesor al frente de la Parroquia San Juan Bautista, pasó a la condición de "Párroco emérito" y siguió residiendo en la casa parroquial y prestando servicios sacerdotales, a pesar de las limitaciones que el paso de los años y cierto deterioro de su salud le imponían.

El domingo 11 de abril de 2010, luego de más de 48 años de presencia varelense y contando con 88 años de edad, entregó su alma al Señor, al que tanto quiso y sirvió.

P. Armando Ireneo Dessy

Canciller del Obispado

de Quilmes

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