Esta no es una crónica más de un reclamo ante la municipalidad de Florencio Varela. Es la crónica de un pedido especial. Pedido alejado de planes, viviendas, alimentos, chapas, colchones y medicamentos. Es el pedido de una audiencia con el intendente. Una audiencia para que el intendente los escuche y del otro lado poder escuchar las reflexiones de quien dirige los destinos del municipio. Asi de simple: una audiencia. Y por una audiencia en disputa, los pobladores de La Capilla, Los Tronquitos y la zona rural, donde se habrá de instalar el Parque Ambiental Regional, ayer “tomaron” el playón de la municipalidad para no dejar entrar y salir a los vehículos hasta tanto no les dieran la fecha y hora para reunirse con Julio Pereyra.
Llegaron bien temprano para instalarse en el hall de recepción, donde el viernes pasado estuvieron 3 horas esperando ser atendidos por el intendente. Tras la larga espera, firmaron un acta con las autoridades en la que estas se comprometían a darle el día y hora para el encuentro con el intendente. Pero no sería el viernes el anuncio, se lo programó para las 15 horas del lunes. A esa hora el municipio está cerrado. Por ende los pobladores estimaron que todos no serían atendidos, sino tan solo una comisión. Por eso fueron llegando temprano y volvieron a instalarse en el hall de la comuna. A las 14.50 alguien se acercó y les dijo que por orden del Secretario de Gobierno, Andrés Watson, deberían dejar el hall pues la reunión se haría en el playón municipal. Los humores ya cambiaron. “Somos vecinos, contribuyentes y nos van a atender en el playón como si viniéramos a pedir ayuda social”, dijo Cristina. Antes de las 15 ya estaban en el playón. No eran más de un centenar, entre hombres, mujeres y niños. Estaba como un integrante más el abogado José Luis Calegari, del Centro Monseñor Angelelli. Dicen que no responden a ningún sector político y que son los vecinos autoconvocados de la zona de La Capilla, que están dando su batalla contre el Parque Ambiental Regional al que llaman “Basural”.
el proceso
El letrado Calegari pasó revista a los hechos que llevaron a los vecinos a votar en asamblea la toma del playón municipal.
“El doctor Jorge López, secretario legal y técnico de la municipalidad, ha ido a La Capilla a decirle a los vecinos que se va a derogar la ordenanza de la sociedad anónima que integran los dos municipios, de Varela y Berazategui. Pidió a los vecinos parar el conflicto porque era inminente la derogación. El contador Héctor Salatino, presidente del Concejo Deliberante ha dicho al semanario La Colmena lo mismo que dice López. En el municipio de Berazategui ya ha ingresado el proyecto de derogación.
la SAPEM y creación de un consorcio. Por eso pedimos una mesa de diálogo donde podamos hablar de esto. Creemos que ante cualquier avance, si lo mínimo que pedimos es una mesa de diálogo, no debería haber anuncios en los diarios. Salatino no es un concejal raso, es el presidente del HCD. ¿Qué vamos a dialogar, si López, Salatino, Gustavo Braña y Angel Oviedo (los dos últimos secretario del HCD y Delegado Municipal de La Capilla, respectivamente) han cumplido diferentes roles para persuadir a los vecinos? Esto es grave para el gabinete municipal”
-¿Ustedes qué ven?
-Vemos que esto se deroga y no hay una mesa de diálogo con los vecinos. Se impulsará otra ordenanza. Nosotros queremos ser escuchados. Que se haga una audiencia pública, que no es vinculante. Esto es para resolver las disidencias.Y hasta lo utiliza el Banco Mundial para las obras públicas. Esto comenzó el 29 de Marzo pasado cuando los vecinos autoconvocados de La Capilla y de Los Tronquitos, con diferentes organizaciones, pidieron una audiencia con el intendente. Nos pasaron a la Secretaría de Medio Ambiente. Cuando planteamos la derogación de la ordenanza, nos dicen que a esta secretaria el reclamo la supera. Pedimos hablar con el intendente. Y que quede en claro que nosotros no decimos No al Basural. Decimos que a esto hay que encontrarle una salida. Nos dijeron que los puntos que planteamos iban a ser estudiados por el intendente. Les pasamos un listado de la gente, con nombre y apellido. Los días previos nos dicen que no nos podía atender el intendente y que nos derivaban a medio ambiente municipal, la secretaria que estaba superada. ¿Me va siguiendo?
-Si, ¿y qué pasó?
-Vinimos el viernes por nuestro pedido que no tiene fecha de audiencia. Salió a atendernos Beatriz Domingorena y Andrés Watson y nos dijeron que les diéramos tiempo hasta hoy lunes (por ayer) a las 15 horas para decirnos con claridad la fecha y día. Por esto se hizo un acta. Hoy nos dicen que la agenda del intendente está complicada porque el sábado y domingo estuvo enfermo, con gripe. Nosotros pedimos la fecha y nos dicen que dejemos un correo electrónico de contacto, que nos van avisar. Nos preguntamos: ¿Si no pudimos con las notas formales, no pudimos lograr algo al hablar con dos secretarios del gabinete, ahora mandando un mail nos van a dar la audiencia?”
la respuesta
A las 15 horas bajó la Secretaria de Desarrollo Sustentable, Beatriz Domingorena, para decirle a los pobladores que el intendente estuvo enfermo el fin de semana y por razones de agenda no había agenda. Pidieron una fecha y la funcionaria reclamó un correo electrónico para confirmar el día y la fecha. Las discusiones duraron más de media hora. En el ánimo de los pobladores estaba bien en claro que no habrían de irse sin la fecha de la audiencia. No pedían un encuentro para el día, para hoy o en la semana. Querían una fecha para cuando haya tiempo. No hubo acuerdo y se pasó a deliberar. La asamblea de vecinos estaba resolviendo cuando un auto intentó salir desde el interior de la comuna. Ese fue el detonante para resolver que nadie entraba ni salía en vehículos desde la municipalidad. La novedad llegó al Secretario de Gobierno quien bajó a las 16. El funcionario volvió a repetir los dichos de Domingorena. Se generaron asperas discusiones, casi innecesarias, pues como bien decía el municipio, tarde o temprano el intendente habrá de recibir a los vecinos.
“Nosotros no les creemos, queremos una fecha por escrito”, dijeron casi a coro tras pasar revista a las necesidades que hay en Los Tronquitos en materia de salud y obras y servicios públicos. Denunciaron la contaminación de la cárcel, que Varela al Día denunció hace cuatro años, en Mayo de 2006. Watson respondió que po este tema el caso ha sido judicializado. Y la salida no llegaba. No había audiencia. El comisario de la seccional Primera, Fernando González, anunció su charla con la fiscal de turno, quien le dio ordenes de alertar a los vecinos sobre la violación de un derecho como son las garantías a poder transitar libremente y con la toma se estaba prohibido la salida de los trabajadores municipales, en sus autos.
“Nosotros no tenemos la culpa. Estábamos tranquilos esperando una audiencia en el hall de entrada y nos trajeron para acá, al playón” aseguro Marcela.
“Si, vinieron para acá porque la municipalidad a las tres de la tarde está cerrada”, dijo Watson.
“¿Y si está cerrada porqué nos convocaron a esa hora? Ustedes Querían dejarnos afuera porque están dilatando esto para no darnos la audiencia con el intendente”, disparo Cristina.
“Fue un error todo”, respondió Watson “pero les pido que liberen el portón, sale la gente y seguimos dialogando”, disparó.
La intransigencia de los vecinos no se hizo esperar. Una segunda asamblea resolvió seguir firme en el lugar hasta lograr la fecha de la audiencia. El comisario anunció que serían aprehendidos cuando la fiscal diera la orden. Ingresaron policías pertrechados. Hubo repudios. Watson subió a su despacho. “El intendente estaba en la Capital Federal firmando convenios y no se lo puede molestar”, se dijo. Más nafta al fuego. Watson bajó con una autobomba para apagar el incendio. Y cuando parecía que se venía el estallido, con la intervención policial, donde chicos y mujeres iban a ser detenidos, apareció la fecha: “La audiencia será para el 13 de Mayo a las 9:45 horas. Serán 8 los vecinos que ingresarán a la reunión” dijo el funcionario y la situación se descomprimió.
“Abran el portón para que salgan los autos”, reclamó Cacho, uno de los manifestantes.
Todo esto se podría haber evitado si desde el comienzo de la iniciativa del Parque Ambiental se hubiera hecho una amplia reunión con los vecinos de la zona. Esto es como una medianera: si al vecino de al lado no le avisamos que vamos a levantar la pared, de seguro que se va a enojar. La gente, hablando se entiende...
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