La vida por un plan: "Dany no te mates"

Máxima tensión en el Cruce Varela por una protesta de cooperativistas que no cobran desde la Nación. Un delegado, conocido como Dany, se atrincheró en la oficina municipal y roció su remera con alcohol para amenazar suicidarse a lo bonzo cansado de esperar cobrar el plan Argentina Trabaja desde hace 7 meses, según denunció.

Se trata de un joven con problemas judiciales que no le permiten conseguir trabajo. Le ofrecieron desde un subsidio a un empleo como chofer. Pidió ganarse el pan con sus manos. Tras una hora de tesión desistió de la iniciativa suicida. Regresó a su casa con un bolsón de alimentos.

Todo comenzó a las 10 de la mañana de ayer cuando un grupo de nos mas de 100 personas cortó la avenida Calchaqui en el Cruce Varela. Las gomas anunciaban que la protesta iba parara largo. Entre los manifestantes estaba Dany, quien horas mas tarde seria protagonista de un suceso poco común: intentar suicidarse a lo bonzo por un plan del Argentina Trabaja que, según él, está esperando cobrar desde hace 7 meses.

El municipio, en horas de la tarde, emitió un comunicado de prensa en el que admitía el conflicto.

En virtud del corte que se produce en el Cruce Varela, la Municipalidad de Florencio Varela informa que esta administración, a través de la Secretaría de Salud y Desarrollo Social, está realizando gestiones para lograr la bancarización y depósito de haberes de 360 cooperativistas del programa "Argentina Trabaja", que quedaron pendientes, de un total de 1200 integrantes.

Estas mediaciones las lleva adelante el secretario de Salud y Desarrollo Social, Alejandro Bagato ante funcionarios del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, a cargo del programa.

"Argentina Trabaja es una iniciativa de gran magnitud y algunos cooperativistas no han logrado todavía la bancarización por inconvenientes administrativos que la Nación se comprometió a resolver", sostuvo Bagato, quien además destacó que el plan ya incorporó a 5 mil varelenses.

Asimismo, resaltó que "los tiempos de demora se evidencian aún más porque son los sectores más desfavorecidos. Pero los estamos acompañando para lograr las soluciones en el menor plazo posible".



DANY NO TE MATES

La protesta avanzaba al compás de las conversaciones. Pasadas las 15:30 el secretario Bagato se hizo presente en la oficina del plan social para entrevistarse con la comisión de delegados. Entre ellos estaba Dany, un muchacho de unos 30 años con graves problemas sociales. Bagato iba a informar del avance de las negociaciones con la Nación cuando Dany se sacó la remera, la enroscó en su cuello para vaciar sobre ella una botella de alcohol fino que encontró sobre un escritorio de la oficina municipal. De inmediato exhibió en su mano derecha un encendedor y lo puso en cuello para gritar: “Me prendo fuego si no me dan el plan que espero desde hace 7 meses”

Todos quedaron paralizados. Llegó la policía y los bomberos voluntarios. Dany no quería hablar con nadie. Con un gorrito de C5N de color negro casi tapó su rostros. Lo sentaron frente a un escritorio. Franco Risso de Defensa Civil y Alejandro Bagato trataron de encaminar la difícil situación. Dany no quería hablar. Solo decía que esperó 7 meses el plan. Que el ya había pagado su condena con la sociedad (estuvo detenido) y que no tenía salida. Preguntó en varias ocasiones si querían que volviera a delinquir. Dijo que estaba enfermo, que quería ganarse la vida honestamente. Estaba desesperado. Bagato intentó sacar un conejo de la galera: ofreció un subsidio de 1000 pesos. Dany dijo que no y amenzó con raspar la perilla del encendedor. “Dany no te mates” le gritaron. Los bomberos, el SUME y la policía también. Un vaso de agua alcanzó Marcela Cosch. La empleada tomó de los hombros a Dany. Fregó sus manos en el cuerpo marca por cortes de la vida en su detención. No había caso. Bagato redobló la apuesta. Ofreció un trabajo como chofer.

-No tengo registro y no puedo sacarlo por mis antecentes.

No había salida. Intervino un empleado municipal. En lugar de calmarlo a Dany le recordó la tarea que ellos hacen por las cooperativas. Poco efectivo. El inútil empleado (no útil para calmar al angustido Dany) disparó un “ya está” a este diario cuando Bagato lo ofreció a Dany prensa como garantías. Solo alcancazamos a decirle al joven que publicaríanos su caso. El empleado ahora abrazaba al muchacho. Todo terminó media hora después cuando Dany se puso a llorar y entregó el encendedor. Fue censado, recibirá ayuda y del lugar se fue a buscar una bolsa de alimentos.